Bruselas rebaja la previsión de crecimiento de España para 2019
La Comisión Europea rebaja el PIB de España en 2019 una décima, hasta el 2,1%, y alerta de la moderación de la creación de empleo por la subida del SMI
La Comisión Europea rebaja una décima su previsión de crecimiento económico para España para 2019, hasta el 2,1%. Lo mismo hace para 2020 y sitúa al PIB de España en el 1,9%. Esto se debe principalmente a la ralentización registrada en el consumo privado. Además, espera que la creación de empleo se modere, en parte, por la subida del salario mínimo interprofesional.
La revisión del crecimiento del PIB es moderada respecto a la del conjunto de la zona euro, según ha publicado en sus previsiones macroeconómicas de invierno. En este caso el crecimiento es del 1,3% en 2019, seis décimas menos que los datos que estimaba anteriormente. Para 2020 también rebaja las previsiones hasta el 1,6%, una décima menos.
Previsión de crecimiento del PIB en España. Fuente: CE
De hecho, para los datos de 2018, la CE estima que la economía española se expandió un 2,5%, el mayor incremento entre las grandes economías europeas. Además, también se sitúa por encima de la media de la eurozona del 1,9%, aunque supone una décima menos de lo que calculaba en noviembre.
Así, el principal factor que explica el menor crecimiento económico es la desaceleración del consumo privado, que crecerá en menor medida que la renta disponible. De hecho, la tasa de ahorro de los hogares cambiará la tendencia y crecerá en 2019 después de haber registrado un «mínimo histórico» en 2018 y seguirá creciendo levemente en 2020.
Aun así, la CE reconoce que gran parte de los riesgos provienen del sector externo. Esto se debe a la desaceleración de la economía global y a la tensión de las guerras comerciales, que seguirá arrojado saldos negativos. A esto se añade una incertidumbre «creciente» tanto a nivel interno como externo.
El SMI ralentiza el empleo
Por otro lado, la Comisión Europea cree que la creación de empleo se «debilitará» en los próximos meses, debido «al esperado impacto amortiguador del incremento en el salario mínimo». No obstante, añade que se seguirá reduciendo el nivel de desempleo a lo largo de todo el horizonte temporal.
Varios organismos han alertado de la pérdida de empleos que puede conllevar la subida del SMI a 900 euros en 2019 que ha introducido Pedro Sánchez. El servicio de estudios del BBVA asegura que a corto plazo se podrían dejar de crear entre 20.000 y 75.000 puestos de trabajo.
A medio y largo plazo, el impacto alcanzaría los 160.000 empleos o 319.000 en el peor de los escenarios. El Banco de España ya había calculado que en el año 2019 se podrían destruir unos 125.000 empleos.