Bruselas avala el Plan Fiscal del Gobierno tras aprobar la reforma tributaria y el nuevo impuesto a la banca
La Comisión Europea da luz verde a las cifras del Gobierno, que implica una subida máxima del 3,4% del gasto público en los próximos años
El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo atiende a la prensa a su llegada al acto de toma de posesión protocolario de altos cargos del Ministerio de Economía, en el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa, a 27 de septiembre de 2024, en Madrid (España). Toman posesión de su cargo la Secretaria de Estado de Comercio, Amparo López Senovilla, la Subsecretaria de Estado de Comercio, el presidente del ICO, Manuel Illueca Muñoz, el director General de Seguros, José Antonio Fernández, y el director general de Comercio, Julián Conthe Yoldi. Alberto Ortega / Europa Press 27/9/2024
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La Comisión Europea ha avalado el Plan Fiscal Estructural que el Gobierno remitió el pasado 15 de octubre, la pieza clave de las nuevas reglas de gobernanza económica de los Veintisiete, y que prometía una subida de ingresos públicos de tres décimas del producto interior bruto (PIB), 4.500 millones de euros, gracias a la reforma fiscal aprobada la pasada semana.
«España liderará el crecimiento entre las grandes economías europeas, y lo hará de manera equilibrada, protegiendo el Estado del bienestar y las necesarias inversiones a futuro, de manera compatible con nuestro compromiso con la responsabilidad fiscal», se ha felicitado el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, en una valoración remitida a los medios de comunicación.
Estas nuevas reglas fiscales suponen el compromiso de España a limitar el incremento del gasto público, neto de medidas de ingresos, en un 3% año a año hasta 2031, además de comprometerse a un ajuste estructural de más de 42.000 millones de euros hasta ese año, de tal manera que se embriden tanto el déficit como la deuda pública de cara a la próxima década.
El Gobierno se comprometió en ese documento que ha avalado hoy la Comisión a dejar el déficit en el 0,8% del PIB en 2031, en tanto que la deuda del Estado se situará en el 90,6%, con un ajuste que permitirá reducir la ratio hasta el 76,8% en 2041.
La luz verde llega justo una semana después de que el Gobierno consiguiera la aprobación de una de las reformas clave de ese Plan Fiscal, la tributaria, que ya contemplaba la reforma del impuesto a la banca para hacerlo permanente, así como otros nuevos tributos (el tipo mínimo de Sociedades a las multinacionales o el del líquido de los vapeadores) y subidas impositivas.
Con esta reforma España aspiraba a sumar tres décimas de PIB en ingresos públicos, lo que supone cerca de 4.500 millones de euros más de recaudación.
