El bono social eléctrico se transforma: novedades para el año 2025
El Gobierno actualiza los descuentos aplicados en las facturas de la luz a través del bono social eléctrico
El bono social eléctrico se trata de una ayuda ideal para aquellas personas que, por situación de vulnerabilidad económica, no consiguen llegar a fin de mes y las facturas se les atragantan. Esta situación es cada vez más común debido a la subida de los precios, sobre todo, en las facturas de luz y gas, así como en alimentos con el aceite.
Esta ayuda económica del Gobierno de España sirve para reducir el coste de su factura de la luz. Su objetivo principal es proteger a las familias con bajos ingresos o en riesgo de exclusión social, asegurando con este descuento que puedan mantener el suministro eléctrico en condiciones asequibles, especialmente en momentos de crisis energética.
Este sistema tiene un funcionamiento muy sencillo. En el momento que se aprueba el bono, todos los meses se reducirá un porcentaje de la factura de luz. Por ejemplo, si Juan, titular en el suministro eléctrico y beneficiario del descuento, recibe un recibo de 50 euros por el gasto del mes de octubre, automáticamente aparecerá el precio a pagar con el bono social descontado.
Dependiendo de los criterios, el bono social eléctrico resta un porcentaje u otro. En este caso, Juan, que al ser un consumidor vulnerable, tiene un descuento del 65%, por lo que, en una factura de 50 euros, solamente pagará 17,50 euros. La cantidad restante será abonará por el Estado, que presupuesta anualmente una cantidad para esta circunstancia.
Quienes pueden beneficiarse de esta ayuda
Para poder beneficiarse del bono social eléctrico, los consumidores interesados deben cumplir ciertos requisitos económicos y sociales establecidos por el Gobierno.
Son considerados consumidores vulnerables los hogares con una renta anual igual o inferior a 2 veces el IPREM (16.800 € en 14 pagas en 2024) o unidades familiares con ingresos más bajos todavía, según los límites establecidos por el Real Decreto. A este colectivo se le conoce como vulnerables severos.
Por último, existe un umbral todavía por debajo, el denominado en riesgo de exclusión social. En este caso, se trata de familias atendidas por los servicios sociales de una administración pública (autonómica o local). En estos casos, no tienen que pagar la factura eléctrica, ya que no se les podrá cortar el suministro si temporalmente al demostrar que no pueden afrontar el pago.
Las novedades de 2025 en el bono social
Ante el aumento de los precios, el Gobierno ha actualizado las condiciones del bono social eléctrico para apoyar a más hogares en el contexto actual. Estas medidas están recogidas en el Real Decreto-ley 18/2022, de 18 de octubre, que incluyen descuentos en la factura de la luz, dependiendo de la situación económica de las familias.
- 65% para consumidores vulnerables que cumplan los requisitos establecidos, como tener ingresos anuales inferiores a dos veces el IPREM (16.800 € en 14 pagas) y superiores a 1,5 veces el IPREM (12.600 €).
- 80% para consumidores vulnerables severos, que tienen ingresos aún más reducidos.
Además, en casos de riesgo de exclusión social, cuando la unidad familiar es atendida por servicios sociales de una administración autonómica o local que asume al menos el 50% de la factura, los beneficiarios estarán exentos de pagar la factura eléctrica. Como hemos mencionado anteriormente, en situaciones de imposibilidad temporal de pago, el suministro eléctrico no podrá ser interrumpido.
Los interesados en solicitar el bono social eléctrico deben ser titulares de un contrato de electricidad en su vivienda habitual y cumplir con los criterios ya mencionados. La solicitud se realiza a través de las comercializadoras de referencia designadas por el Gobierno, aportando la documentación necesaria que acredite su situación.