BBVA alerta que España necesitará un millón de viviendas hacia el 2030
Mientras que BBVA grafica el déficit habitacional de España, CaixaBank prevé que el precio de la vivienda subirá un 4% este año
Una mujer camina frente a un escaparate de anuncios de viviendas en Madrid (España). Foto: Ricardo Rubio/Europa Press
Comentarios
CaixaBank revisa al alza su estimación sobre el precio de la vivienda hasta el 4% interanual en el 2024, frente al 2,7% de su última previsión, mientras que BBVA prevé que sean necesarias algo más de un millón de viviendas de aquí a 2030, unas 170.000 al año.
Así se desprende de los últimos informes de los centros de estudios de ambas entidades consultados por Servimedia. CaixaBank Research también estima que el número de compraventas anual se situará en torno a las 565.000 operaciones, 15.000 más que en su último análisis.
El análisis afirma que el mercado inmobiliario seguirá viéndose beneficiado «por la robustez del mercado laboral, el descenso de los tipos de interés, el bajo nivel de apalancamiento de las familias a nivel agregado y la resiliencia de la demanda extranjera».
BBVA alerta del déficit en el mercado inmobiliario
Por su parte, BBVA Research señala en su último informe ‘Situación España’ que el reto al que se enfrenta el sector de la vivienda es «significativo» y las medidas anunciadas «insuficientes» dadas las tendencias en la población y tamaño medio del hogar.
El análisis aplaude algunas políticas anunciadas en varias comunidades autónomas «para acelerar la llegada al mercado y hacer más atractiva la construcción de vivienda social», así como la línea de avales para construcción de nueva vivienda por valor de 2.000 millones de euros, pendiente de aprobar de el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana.
No obstante, el centro de estudios cree que esto es «insuficiente», ya que «la mayor parte de los esfuerzos pueden generar todavía más desequilibrios». En este sentido, critican que los controles de precios como el que ha aprobado Cataluña «pueden aliviar temporalmente la situación de aquellos que tienen un contrato de alquiler», pero «no resuelven el problema original de la falta de oferta y podrían incluso agravarlos».
Según su previsión, estos límites «a medio plazo, llevarán a incrementos mayores en los nuevos contratos, un deterioro de los activos, un redireccionamiento de la oferta hacia la venta o al afloramiento de al repunte de la economía sumergida».
Además, el informe apunta que las medidas que «alientan la demanda», como los avales ICO a la compra de primera vivienda «solo lograrán presionar más los precios al alza» y subraya que el retraso en la aprobación de la reforma de la Ley del suelo «corre el riesgo de dilatar aún más el desarrollo de los planes urbanísticos».
