BBVA reduce su previsión de crecimiento del PIB para 2024, hasta el 1,8%
BBVA Research asegura que la incertidumbre global y el aumento en el precio del petróleo contribuyen a la revisión a la baja de las previsiones económicas
BBVA Research ha mantenido sin cambios su estimación de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para el año 2023 en un 2,4%. Sin embargo, la entidad ha reducido sus expectativas para 2024, disminuyendo la proyección del crecimiento económico del 2,1% anterior al 1,8%,
El recorte de tres puntos en las expectativas de crecimiento de la economía española de cara al próximo año, según ha argumentado la entidad, se debe a una «desaceleración cíclica» en la economía española como principal razón de esta revisión a la baja.
Así lo recogen las conclusiones del informe que el banco presidido por Carlos Torres Vila elabora de forma trimestral y que lleva por título ‘Situación España’.
El documento ha sido presentado por el director de BBVA Research y economista jefe de Grupo BBVA, Jorge Sicilia; el responsable de Análisis Económico, Rafael Doménech; y el economista jefe para España, Miguel Cardoso.
El PIB sufrirá un «deterioro moderado» en 2024
Esta reducción en las previsiones económicas para 2024 se justifica por el «deterioro moderado» de las perspectivas globales en un contexto de elevada incertidumbre económica. Los indicadores que anticipan el comportamiento de la actividad económica, especialmente en Europa, reflejan un «empeoramiento generalizado» tanto en países como en sectores.
La posibilidad de una moderación en el crecimiento económico en los próximos meses es una preocupación, y las previsiones se ven afectadas por un «sesgo a la baja». Además, la productividad del empleo experimentó una caída «inesperada» en el segundo trimestre, y según BBVA Research, se espera una desaceleración en la creación de empleo en comparación con la primera parte del año, especialmente en el sector de servicios.
La entidad prevé que tanto en 2023 como en 2024, los precios muestren promedios cercanos al 4%, con cifras específicas del 3,7% y 3,6%, respectivamente. Esto se debe a la dificultad de prever una caída de la inflación hacia niveles consistentes con el objetivo del BCE (2%) en ausencia de una reducción significativa en el precio del petróleo o una recesión económica.
Además, se espera que la economía se vea impactada en el futuro por las subidas de los tipos de interés, con un 4,5% para el tipo de interés de refinanciación, y la «necesaria» reducción del déficit público, lo que restringirá la demanda interna.
Sin embargo, BBVA Research destaca que a pesar de este empeoramiento de las perspectivas económicas, España mantendrá un «diferencial positivo» en comparación con el resto de Europa, donde se espera un estancamiento económico más pronunciado.
Además, la entidad financiera considera que la recuperación económica puede continuar gracias a la fortaleza de los hogares y las familias en términos de balance, la normalización en la actividad industrial, el respaldo que puede brindar la aceleración en la implementación de los fondos europeos y el aumento de la población en edad de trabajar.