La banca prevé un buen año, pero alerta sobre el impacto del impuesto al sector
Los líderes del sector financiero insisten en que el gravamen afecta no solo a las entidades, sino a la economía nacional en su conjunto, instando a una revisión de la medida
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, antes de participar en la apertura del IV Observatorio de las Finanzas organizado por El Español, este martes en Madrid. EFE/Fernando Alvarado
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El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, ha arremetido nuevamente contra el impuesto al sector bancario, cuestionando su impacto en la competitividad nacional. Durante su intervención en el IV Observatorio de las Finanzas, organizado por El Español e Invertia, ha reconocido que la rentabilidad del sector ha mejorado, «pero no es alta». En el caso de la entidad, el retorno es del 13 % sobre el capital, sin embargo, la media de las empresas del IBEX 35 es superior, pues está en el 17 %, ha subrayado.
El ejecutivo ha lamentado la percepción negativa hacia los beneficios bancarios, subrayando la importancia de retribuir a los accionistas, entre los que se encuentra la Fundación la Caixa, que retorna ese beneficio «a la sociedad» y también el propio Estado, a través del FROB. Por lo tanto, «no es que nos dé vergüenza, nos parece una magnífica noticia» repartir más dividendo, ha añadido Gortázar.
Ángel Rivera, consejero delegado de Santander España, ha respaldado la necesidad de que las empresas generen beneficios y paguen impuestos para impulsar el progreso del país. Sobre el gravamen extraordinario, ha recordado que ningún país tiene un impuesto de este tipo sobre los ingresos y ha coincidido en que cualquier decisión del Gobierno al respecto -ya sea ampliar su duración o hacerlo permanente- se podría debatir y «dialogarla». Sin embargo, ha advertido sobre la importancia de un entorno regulatorio claro que fomente la inversión.
Además, Rivera ha pedido «claridad en las reglas del juego» y ha advertido de que «no todo vale», dando a entender que si los bancos españoles cotizan por debajo de su valor en libros es porque se ahuyenta a los inversores.
Por su parte, Gonzalo Rodríguez, del BBVA, ha afirmado que «el impuesto es malo para la economía en su conjunto» y afecta la capacidad de la banca para financiar el crecimiento económico, ya que gran parte de sus ingresos se destina a impuestos, remuneración de accionistas y préstamos a empresas y familias. «A mayor impuesto, menos capacidad de la banca para financiar ese crecimiento de la economía», ha resumido.
Un 2024 prometedor
A pesar de las preocupaciones, los tres grandes bancos de España, junto con el Banco Sabadell, proyectan un horizonte optimista para el año en curso. Más allá de las preocupaciones por los impuestos, estos gigantes financieros confían en que una eventual reducción de los tipos de interés a partir de junio impulsará la demanda de créditos en la segunda mitad del año.
Durante los primeros meses del 2024, los indicadores económicos muestran señales alentadoras. La morosidad sigue bajo control, y los datos relativos a los pagos con tarjeta sugieren que el consumo mantiene su fortaleza. El consejero delegado de CaixaBank ha revelado que el gasto de los clientes del banco ha experimentado un crecimiento del 4%, mientras que el de los clientes extranjeros ha aumentado en torno al 28% en comparación con el año anterior.
Tanto Santander como BBVA han corroborado esta tendencia al alza en el gasto con tarjetas, destacando una mejora sustancial en este aspecto.
Por su parte, el director general de Banco Sabadell, Carlos Ventura, en el mismo foro, ha compartido la idea de que el negocio irá «de menos a más» y la demanda de crédito irá poco a poco creciendo.
Es más, ha augurado que también se verá en el mundo empresarial, el que menos crédito está demandando, pues está convencido de que las empresas tienen proyectos en los que invertir y la banca mucho empeño en acompañarles.
