El legado de Alberto Garzón se derrumba: las apuestas online, más vivas que nunca
El Gobierno se había lanzado en una cruzada contra el juego y las apuestas online aunque, finalmente, los efectos se han hecho notar poco
El ministro de Consumo en funciones, Alberto Garzón, asumía su cartera con pocos cometidos -debido a su separación de Sanidad-, pero con objetivos claros. Las apuestas online estaban en rojo en el cuaderno de trabajo. Casi cuatro años después, las transacciones digitales con las apuestas lidera el comercio electrónico en España.
El inicio fue esperanzador. A las pocas semanas de tomar el cargo, Garzón lanzaba una serie de medidas para atajar el problema real que estaba generando el juego y las apuestas online, sobre todo, entre los grupos de población más vulnerables y fáciles de captar y caer en potenciales ludopatías.
En un principio, todo se centró en la publicidad. Restricción de horarios y espacios, y una gran limitación para difundir el mensaje. Como los resultados no son inmediatos, desde el Ministerio de Consumo se dieron un tiempo. El suficiente para ampliar la Ley 13/2011 sobre Regulación del Juego.
Aquí, los objetivos son mayores. Se obliga a los operadores de juego online a mandar mensajes de aviso cada hora a los usuarios; éstos tienen el derecho de conocer un balance mensual sobre sus apuestas y cómo les ha ido; o medidas de restricción temporal y para grandes jugadores.
Esta ampliación del Real Decreto 1614/2011 se está cocinando. Ahora mismo hay abierto un plazo de consulta pública que finaliza a mediados de octubre, donde todos los interesados pueden enviar sus observaciones. Pero algo no está saliendo bien.
El movimiento sigue
Según el último informe trimestral sobre comercio electrónico de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), en el primer trimestre de 2023 los juegos de azar y apuestas lideraron el ranking por compraventas (7,2%).
Es decir, del total de transacciones que se hicieron en ese periodo, 363 millones, fue esta tipología la que dominó. Si bien es cierto que, por volumen de negocio, queda por detrás de todo lo relacionado con las actividades turísticas a nivel de porcentaje, en estos momentos supera a los servicios financieros o la compra en restaurantes.
Pero no es lo peor. Cómo publicó el diario Cinco Días a principios de 2023, había una noticia positiva: se apreciaban indicios de caída de nuevo usuarios. Sin embargo, el contexto era de mayor inversión publicitaria, de nuevo, y, a su vez, una consolidación de quienes ya eran jugadores. Por si fuera poco, la facturación sigue en aumento.
Por tanto, las medidas no están teniendo por el momento el efecto deseado. Es cierto que se trata de medidas a largo plazo, pero de momento no hay un reflejo. Además, también debe enfrentarse a los ‘lobies’ del sector.
Presión hacia el Gobierno
La Asociación Española de Juego Online (Jdigital) ha pedido al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y al ministro Alberto Garzón, la suspensión de la tramitación del proyecto de Real Decreto por el que se modifica el Real Decreto 1614/2011, de 14 de noviembre, para la introducción de un sistema de límites conjuntos de depósito en el juego online, que el Ejecutivo ha sometido a información pública.
Así lo ha dado a conocer la asociación, que ha remitido cartas a Sánchez y Garzón expresando «la falta de idoneidad» de la tramitación del citado decreto, «dado el contexto político actual». Además, ha expresado su «sorpresa y disconformidad» ante tal procedimiento.
«En un momento marcado por la falta de consenso político y la presencia de un Gobierno en funciones, éste debe limitar su actuación en relación con la tramitación de medidas a cuestiones de urgencia y de interés general, tal como establece el artículo 21.3 de la Ley 50/1997, de 27 de noviembre», argumentan.
En este sentido, Jdigital considera que a pesar de que se trata de un trámite informativo, «carece de lógica en cuanto que obliga a las partes afectadas por la norma a cumplir plazos». «Sorprende la celeridad en la tramitación de esta modificación del real decreto, cuando la legislatura está concluida. Y más aún cuando otras modificaciones y normativas aprobadas durante la pasada legislatura todavía no han entrado en vigor», añaden.