La Airef alerta que el envejecimiento de la población impulsará al alza la deuda pública
La presidenta de la Airef, Cristina Herrero, augura que el país habrá de acometer "ajustes para colocar la deuda en senda descendente hasta 2038"
La presidenta de la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), Cristina Herrero, avisó este miércoles que a finales de esta década la deuda pública española tendrá «una senda ascendente» como consecuencia del envejecimiento de la población, una tendencia a corregir ante el nuevo marco de reglas fiscales europeo.
Así lo dijo en el encuentro ‘Looking at the Future’ organizado por EY, en el que Herrero explicó las claves de las nuevas reglas fiscales y los retos que se presentan para las finanzas públicas.
La presidenta de la Airef manifestó que España tendrá que realizar «ajustes para colocar la deuda en senda descendente hasta 2038», ya que el plan que los países tienen que presentar a Bruselas será por cuatro años, pero el plazo de ajuste puede extenderse de cuatro a siete años si el país acredita que va a realizar o que está realizando reformas o inversiones.
«El nuevo marco de reglas fiscales europeo nos obliga a que en septiembre de este año presentemos un plan fiscal estructural en principio de 2025 a 2028», añadió, «que tiene que cumplir principalmente con que se coloque la deuda en una senda descendente durante, al menos, los diez años siguientes a la finalización del periodo del plan».
Sin embargo, Herrero advirtió que «a finales de esta década la deuda tendrá una senda ascendente como consecuencia del envejecimiento de la población en el gasto público». En ese sentido, reconoció que la complejidad técnica de esa reducción de deuda es «mucha», ya que se trata de múltiples tareas «por delante en poco tiempo».
Así, recordó que «no hay que olvidar que en 2024 ya hay reglas y suponen que el gasto en el ámbito nacional no puede crecer más del 2,6%». En ese sentido, reiteró la previsión de la Airef de que España tendrá que ajustar su deuda pública 0,64 puntos anuales durante el periodo 2025-2028, hasta un total de 2,56 puntos acumulados, para cumplir con las nuevas reglas de la Unión Europea.
Aseguró que la labor de España hasta la presentación de su informe en septiembre a la Comisión Europea «no es sencilla» y lamentó que «vamos a contar con una trayectoria técnica que nos remitirá la Comisión, pero todo apunta a que va a ser tardía». «Previsiblemente se conocerá a finales de septiembre cuando los países manden su previsión de ajuste», apuntó.
Evaluar que los recursos «no se estén malgastando»
Herrero también puso el foco en la implicación de las comunidades autónomas en el diseño del plan para que exista «coherencia y consistencia entre el marco de reglas fiscales nacional y europeo». En esa línea, insistió en que «la reforma del marco fiscal nacional no se puede seguir aplazando», tal y como viene reclamando la Airef.
«Creo que todavía no hemos asimilado que la regla de gasto, que siempre ha sido una regla de segundo orden, va a ser la base», opinó, ya que «va a ser la variable objeto de supervisión y el debate que tenemos es si las comunidades tienen que estar en equilibrio o si deben tener un déficit del 0,1%».
Por otro lado, sostuvo que «el reto es grande en el ámbito institucional», debido a que el plan a presentar en siete meses «va a requerir ajustes que comprometen la actuación pública en los próximos años». Indicó que el fin de la evaluación de las políticas dentro de las nuevas reglas «no es generar espacios fiscales», sino «dar la certidumbre de que los recursos públicos no se están malgastando».
«El gran reto es que las políticas públicas se diseñen pensando que van a ser evaluadas», destacó tras defender que implica «responsabilidad dentro de la propia Administración» al existir un seguimiento de los resultados que se están obteniendo con las políticas y las medidas implantadas, sin dar lugar a un «vacío».