El 2024 culmina una subida fiscal del 40% en la era Sánchez hasta rozar 300.000 millones
El Estado ha recaudado hasta noviembre 20.000 millones más que en el mismo periodo del año pasado
Hacienda va a recaudar al cierre de 2024 cerca de 300.000 millones de euros en ingresos tributarios, una cifra récord que se ha más que duplicado en apenas una década y que solo desde que llegó Pedro Sánchez a La Moncloa ha aumentado en cerca de 80.000 millones de euros en impuestos.
Los últimos datos de recaudación de la Agencia Tributaria muestran que, hasta noviembre, el Estado ha recaudado 273.993 millones de euros, más de 20.000 millones que en el mismo periodo del año pasado, pero ya son 2.000 millones más que en todo 2023, cuando los ingresos procedentes de impuestos (de nuevo) rompieron su techo histórico.
Eso implica que, si la recaudación sigue este rimo, el año cerrará superando los 290.000 millones de euros para Hacienda, mientras que en 2018 el Estado ingresó 208.718 millones de euros. Es decir, más de 80.000 millones de euros más en 2024 que en el año en el que el PSOE volvió a tomar las riendas del Ejecutivo.
Fuentes del PP aseguran que estas cuentas acreditan una subida de todos los impuestos a todos los españoles y contabilizan, al menos, 81 subidas fiscales durante el mandato de Sánchez y con María Jesús Montero al frente del Ministerio de Hacienda, «más el último hachazo aprobado que significará que los españoles paguen otros 9.000 millones más de impuestos como mínimo».
Los ingresos tributarios no incluyen las cotizaciones sociales que, a finales de 2023, supondrán 50.000 millones más que en 2018. Unos ingresos que no derivan únicamente de la creación de empleo desde entonces, sino también de las subidas aplicadas a este concepto para financiar las pensiones.
En total, los ingresos del Estado en 2024 se situarán en el entorno de los 460.000 millones de euros, 140.000 millones más que en 2018, cuando la suma total de impuestos y cotizaciones sociales fue de 323.717 millones.
Este aumento de los ingresos, ¿responde a la inflación, a la mayor actividad económica o a una subida de los tipos impositivos? La respuesta es un poco de todas ellas. En cinco años, entre 2018 y 2023, el PIB a precios corrientes, sin descontar la inflación, aumentó un 21,4%. Y el empleo, avanzó un 9,2%. Si la recaudación se incrementó a un ritmo superior al 30% tuvo que ser, entonces, por una mezcla de todas ellas.
«Esta realidad es más clara si nos vamos a los datos de recaudación del IRPF, pues frente a una subida del empleo de un 9,20% la recaudación de IRPF lo ha hecho en un 45%», destacan en el PP.
El IRPF es el gran impuesto recaudador y, hasta noviembre, ya se ha ingresado por la renta 121.069 millones de euros (7,5% más), más que en todo 2023, lo que augura un nuevo récord en este tributo. Por Sociedades el Estado ha recabado cerca de 34.000 millones de euros (13,5% más) y la desaparición de la mayoría de rebajas en el IVA han hecho que avance esta partida hasta los 86.374 millones (7,4%).
Pero este aumento de los ingresos no se ha traducido en un incremento de la presión fiscal al mismo ritmo. Según los datos que recoge Eurostat, nuestro país ha pasado de tener una presión fiscal del 35,2% del PIB en 2018 al 37% en 2023, debido fundamentalmente a las revisiones del tamaño de la economía de nuestro país. Con todo, la diferencia es aún de tres puntos tanto con respecto a la Unión Europea como con la zona euro y precisamente cerrar esta brecha es uno de los compromisos del Gobierno de Pedro Sánchez desde su llegada.
De hecho, la reforma fiscal que pactó con Bruselas para recibir los fondos europeos tenía, en principio, el objetivo de cerrar esta diferencia con los Veintisiete. Sin embargo, como informó ECONOMÍA DIGITAL, esta ambición se ha rebajado en las últimas semanas, aspirando ahora mismo a aumentar estos ingresos en apenas tres décimas del PIB (4.500 millones al año).
El modelo del Gobierno central contrasta mucho con el aplicado por Isabel Díaz Ayuso desde que llegó a la Puerta del Sol. La presidenta de la Comunidad de Madrid hizo gala en su balance anual de nueve bajadas de impuestos que entrarán en vigor en 2025, por un valor de 170 millones de euros, además de otros 130 millones de ahorro por la rebaja en Sucesiones y Donaciones prevista para el próximo ejercicio.
«[Sánchez] no soporta que Madrid sea la locomotora económica del país; que seamos los que más empleo, empresas e inversión generamos; que seamos los que, con menos impuestos, más recaudamos; que seamos la región más de moda del mundo, con los mayores índices de libertad y prosperidad», dijo la líder madrileña, que subrayó las 30 rebajas de impuestos que ha efectuado.