Repsol quiere el control de las gasolineras catalanas de Petrocat

Repsol quiere hacerse con las gasolineras catalanas de la red de Petrocat. Con el 45% del capital de esta compañía, la petrolera presidida por Antoni Brufau pretende conseguir un “control exclusivo” de la empresa. Es decir, incrementar su poder en más de un 50%.

La intención de aumentar su participación es firme, tal y como reconocen fuentes de la compañía. Evitan concretar detalles de la operación hasta que no se pronuncie la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Competencia tendrá que analizar si Repsol incurriría en una posición de dominio con la compra de acciones.

Cepsa y Generalitat

Petrocat, fundada en 1987, cuenta con otros dos accionistas: Cepsa, que al igual que Repsol, controla un 45% del capital y el Instituto Catalán de la Energia (Icaen) –dependiente de la Generalitat de Catalunya– que representa el 10% restante.

En la actualidad, la Generalitat cumple una función meramente arbitraria. En caso de conflicto entre las dos compañías petroleras, intercede para llegar a una solución. Pero si Repsol aumenta su participación y supera el 50% de capital, el Icaen jugará un papel prácticamente testimonial. A pesar de ello, no está dispuesta a vender su participación.

Con este escenario, las acciones de Cepsa son el principal objetivo de Brufau. Faltará por ver si finalmente, la CNMV da luz verde a la adquisición y sin con ello, Repsol toma las riendas de la empresa catalana.

Plan de viabilidad

El cambio accionarial en Petrocat llega en un momento crucial para la empresa presidida por Pascual Olmos. El pasado septiembre reconoció unas pérdidas de 8,6 millones de euros, casi un récord en la historia de la compañía.

Con una red de servicio que supera las 70 gasolineras en Catalunya, la petrolera está inmersa en un plan de saneamiento de sus cuentas con el objetivo de remontar la delicada situación, tal y como reconocieron fuentes de la empresa.