Mariona Carulla aspira a perpetuarse al frente del Orfeó Català
Mariona Carulla se presenta a la reelección como presidenta del Orfeó Català
Mariona Carulla, de 74 años, se presentará a la reelección como presidenta de la Associació Orfeó Català, entidad vinculada al Palau de la Música, dos entidades culturales regidas por una fundación que también preside Carulla.
En la asamblea general ordinaria del Orfeó Català de este jueves, Carulla y la mayor parte de su junta directiva dimitieron de sus cargos, pero para volverse a presentar en las elecciones convocadas para el próximo 26 de junio. Hasta entonces, el presidente interino será Joaquín Uriach, presidente del grupo farmacéutico Uriach.
El plazo para presentar las candidaturas a la presidencia del Orfeó Català finaliza el 27 de mayo, pero fuentes internas ponen en duda de que surja un aspirante alternativo.
Mariona Carulla relevó a Félix Millet y no suelta la silla: aspira a la reelección en el Orfeó Català
En tiempos de Fèlix Millet, Carulla era su vicepresidenta en el Orfeó Català, miembro de la comisión delegada de la Fundación Orfeó Català-Palau de la Música y vocal del consorcio donde estaban representados el Ayuntamiento de Barcelona, la Generalitat y el ministerio de Cultura. Siempre aseguró, incluso ante el tribunal del caso Palau, que nunca se enteró de las tropelías de Millet.
La madre de Mariona Carulla, Maria Font de Carulla, fallecida en 2016, ya fue vicepresidenta con Millet. Para los Carulla estar en el Orfeó Català y en el Palau de la Música ha pasado a ser una cuestión dinástica.
Los servicios jurídicos de la asociación y de la fundación recurrieron la sentencia del caso Palau. Según informaron en la asamblea del Orfeó de este jueves, reclaman un millón de euros más de los reconocidos en la sentencia judicial. Sin embargo, ni el Orfeó Català ni el Palau de la Música presentaron en su momento acusación contra Convergència. Por este motivo, no se beneficiarán de la sanción de más de seis millones de euros impuesta al partido por el caso Palau. El Tesoro del Estado se está frotando las manos.