Madí niega el vínculo con Concatel

También Flamerich asegura que se inhibió en el contrato TIC de la Generalitat antes de la fase de adjudicación

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp

Las pesquisas de la Oficina Antifraude de Catalunya (OAC) y de la Fiscalía sobre presuntas irregularidades en contrataciones públicas en favor de Telefónica que durante el jueves y el viernes ha desvelado Economía Digital han causado la reacción de sus protagonistas principales. Así, mientras la operadora se ampara en su desconocimiento de las denuncias presentadas, otras personas directamente citadas por los informes niegan su participación en los hechos que se investigan.

David Madí, antiguo alto cargo del Govern de CiU presidido por Jordi Pujol y alto cargo del partido durante los años que ejerció como oposición, ha señalado que las presuntas relaciones que se le atribuyen con Concatel, una de las subcontratistas de Telefónica, no existían en el momento en el que se produjo la adjudicación del mayor contrato de telecomunicaciones de la Generalitat, en agosto de 2012.

Venta de participación

Un año antes, en 2011, Madí vendió su participación en la empresa Vantura ESS, SL (que forma parte del grupo Concatel), según ha podido comprobar este medio en documentos públicos que lo acreditan. “Se trató de un proyecto para impulsar una start up que finalmente no salió adelante. Jamás he mantenido ningún tipo de vínculo con administraciones públicas desde que deje la política (en 2010)”, asegura el actual presidente de Endesa en Catalunya y vicepresidente de Applus .

La información desvelada por Economía Digital sobre los eventuales vínculos del director general de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información, Carles Flamerich, con Concatel han caído como un jarro de agua fría en su departamento. El propio Flamerich ha aclarado que su trabajo y colaboración con la empresa no se produjo entre los años 2010 y 2011, como señala el informe de la OAC, sino que sólo duró hasta diciembre de 2010 en condición de colaborador exterior de la empresa que facturaba por sus servicios.

Tranquilo y exculpado

El máximo responsable de las telecomunicaciones catalanas también ha insistido en que su inhibición en la mesa de contratación del mayor contrato adjudicado por la Generalitat en los últimos años se produjo a tiempo. “No era necesario –explica–. Pero me inhibí cuando comenzó la fase de concurso clásica, la primera fue el diálogo competitivo, una formula que Bruselas ampara con objeto de realizar compras complejas y habilita el hablar con las compañías de un sector”.

Flamerich dice sentirse “muy tranquilo” y a la espera de que la Fiscalía solicite aclaraciones sobre los hechos que la OAC ha puesto en su conocimiento. “En absoluto he influido en favor de Telefónica”, señala el representante del Govern catalán.

Economía Digital

Recibe nuestra newsletter diaria

O síguenos en nuestro  canal de Whatsapp