Letsbonus y Groupalia esquivan la demanda por estafa piramidal
Los portales de cupones descuento controlados por Antonio Alcántara frenan los planes de los afectados por impagos
Groupalia y Letsbonus ganan tiempo. La demanda por «estafa piramidal» que la plataforma de afectados por impagos ultimaba contra el grupo de Antonio Alcántara, quien todavía debe afrontar el juicio con parte de sus extrabajadores, tendrá que esperar. Las previsiones apuntaban a que sería este viernes cuando se presentaría la denuncia, pero la firma catalana informó a los demandantes en un último momento: una de las sociedades, Letsbonus, había solicitado días antes la entrada en preconcurso de acreedores.
El nuevo escenario, según el abogado de los demandantes, Vicente Frasquet, cambia la hoja de ruta marcada e indica que «debe estudiarse». Frasquet ya había recibido la solicitud de un centenar de perjudicados – entre los que había proveedores y consumidores— que se sumaban al recurso. El letrado, a juicio de los testimonios, entiende que la sociedad operaba de manera fraudulenta y piramidal al utilizar parte del dinero de los nuevos proveedores para pagar a los antiguos y dar apariencia de viabilidad a pesar de los problemas de liquidez.
«La intención era cerrar la lista de afectados esta semana, presentar la querella y dejar abierta la puerta de nuevas incorporaciones en la fase de instrucción”, explica en relación a los plazos. Sobre el volumen de afectados, Frasquet afirma que «entre comercios y usuarios pueden ser millares» porque, por ejemplo, «sólo de un hotel afectado hay 700 clientes», aunque «eso no significa que se apunten todos». Las estimaciones del área legal apuntan a que la deuda con proveedores rozaría los 250.000 euros, aunque la cifra podría incrementarse.
Los demandantes entienden que la sociedad utilizaba parte del dinero de los nuevos proveedores para pagar a los antiguos
Ahora se abre una vía de conciliación. El encargado de la defensa de Letsbonus explica que la solicitud del preconcurso buscará llegar a un plan de convenio de acreedores que marque los plazos e importes asumibles para los gestores, quienes –sin éxito hasta el momento– han buscado en los últimos meses un comprador. Sánchez reconoce que desde que adquirieran la compañía en el pasado año, “los problemas han sido mayores de los previstos”. No obstante, la solicitud del preconcurso es una clara muestra de “voluntad de pago”, explica.
Los males de Groupalia y Letsbonus se iniciaron a finales de 2016. Los comerciantes alertaron de que la firma de cupones descuento no cumplía sus acuerdos. La reiteración en los impagos provocó que muchos no aceptaran más cupones y rompieran las relaciones comerciales. Hasta hace poco, a pesar de que algunos ya no trabajan con las empresas, todavía aparecían en las webs.
Los trabajadores también esperan
Los siguientes afectados fueron los trabajadores. A principios de junio, Groupalia anunció el despido de toda la plantilla –a excepción de un técnico– basándose en «causas objetivas” por “el resultado económico obtenido» durante el último ejercicio. Según resaltó la empresa, los ingresos por ventas correspondientes a 2016 llegaron hasta los 7,3 millones de euros, frente a los casi trece millones que generó en 2015 (un 42% menos). El conflicto llegó hasta el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), pero sigue enquistado después de que Alcántara se librara en dos ocasiones de la comparecencia ante el juez, alegando motivos de salud.
El juicio entre Groupalia y los extrabajadores sigue enquistado en el TSJC
Groupalia y Letsbonus están controlados, directa o indirectamente, desde Nice and Crazy, la única sociedad de la que Antonio Alcántara es administrador único. Alcántara compró Groupalia y Offerum en febrero del pasado año y seis meses después, en agosto, hizo lo propio con Letsbonus. Sumaba así dos firmas más a su cartera, donde ya contaba con Offertix y Offerum.
Letsbonus está en manos de Unkil Trade, empresa de la que Javier Llorens es administrador único. Llorens, también apoderado de Nice and Crazy y Offertix (Interven Trade SL), es «la mano derecha de Alcántara», según fuentes cercanas a la empresa.
Groupalia, por su parte, tiene como administrador único a la sociedad a Didilia Items, una mercantil que tienen a su vez a Guillermo Puig Boix como administrador único, quien ostenta este mismo cargo en otras diez sociedades y «nunca ha pisado Groupalia», según las mismas fuentes.