Fridman pide ayuda a la CNMV para resolver su opa sobre DIA
Letterone, el fondo de Mikhail Fridman, solicita a la CNMV que estime si su oferta de 0,67 euros es equitativa
Letterone pide ayuda a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para resolver su opa sobre DIA a 0,67 euros por acción. El fondo del magnate ruso Mikhail Fridman, ante la falta de apoyos que hasta el momento ha conseguido para atar su opa, pide ahora al regulador un cambio de condiciones. La petición es clara: rebajar el umbral de aceptación desde el 64,5% al 50%.
Fridman ya deslizó el pasado viernes, cuando pidió una nueva prórroga, que quizá optaba por este camino. La petición a la CNMV, que oculta el objetivo de sacar adelante la opa sin subir el precio — es el reproche principal de los accionistas — , puede ser clave en la operación si la entidad presidida por Sebastián Albella da luz verde.
De acuerdo a la documentación enviada a la CNMV, Letterone afirma que situación de la cadena de supermercados es límite. DIA se encuentra, según su comunicado, «en serias dificultades financieras».
Este factor ha desencadenado que Letterone ha encargado la elaboración de un informe independiente para valorar la oferta de 0,67 euros. Considera que este precio es «equitativo» por la evolución del negocio durante el primer trimestre, que ha llevado a DIA a tener un valor implícito de 0,23 euros por título.
En manos de la CNMV
Si la CNMV escucha y acepta los argumentos de Letterone, el éxito de la opa estará más cerca. Fridman no tendría que sumar como mínimo el 35,5% del capital al 29% que ya controla, hasta atesorar aproximadamente el 64,5% de las acciones de DIA.
Las exigencias serían muy inferiores: bastaría con sumar el 50% del capital más una acción, lo que se pone de cara porque Letterone ya tiene el 29% de las acciones y porque mucha parte del capital está en manos de fondos que compraron a un precio inferior a lo que Fridman está dispuesto a pagar ahora.
Los apoyos recibidos hasta el momento han sido muy pocos. En su primera prórroga para extender el periodo de aceptación de la opa, Fridman admitió que solo contaba con el 4,6% de los títulos, lo que le llevó a forzar una reunión con los accionistas minoritarios, que siempre han sido muy críticos con él pero que eran fundamentales para que la operación saliera adelante.