El ‘tijeretazo’ de Nissan Barcelona: recorta 100 empleos
El fabricante japonés elimina más de un centenar de puestos de trabajo después de perder el Pulsar por su falta de éxito
Nissan Barcelona ya sufre las consecuencias del adiós del Nissan Pulsar. El fin del vehículo que debía salvar la instalación catalana hizo que la cúpula de la empresa diseñase un plan de ajuste en el que sobraban un centenar de trabajadores. Apenas cuatro meses después del vacío dejado en la fábrica, el tijeretazo ya afecta al menos a 103 empleados. Y la tendencia está lejos de remitir: la producción de este ejercicio apenas superará las 80.000 unidades.
El sindicato Comisiones Obreras explica que en la reunión del comité de empresa celebrada el pasado 18 de octubre, la cúpula del fabricante japonés cifró en 86 las prejubilaciones que se realizarán. Abandonarán la empresa en tres fases: 31 personas saldrán el 30 de noviembre, 21 saldrán el 31 de enero y 29 saldrán el 31 de marzo.
Si bien la oferta para los mayores de 57 años del centro ubicado en la Zona Franca es un éxito de cifras, no corre la misma suerte el plan de bajas voluntarias, limitado a los empleados con una antigüedad superior a seis años. Apenas 17 trabajadores se adscribieron a la propuesta de la empresa.
Entre ambos paquetes, el recorte asciende hasta 103 personas. Fuentes oficiales de Nissan confirmaron la cifra. “Es clave para gestionar el excedente de plantilla a consecuencia del fin del ciclo de vida del Pulsar”, dijeron en su momento.
Otro recorte de producción
Las cifras del ejercicio 2018/2019 –de abril a marzo— se mantienen en la misma atonía con la que se cerró la temporada pasada. De los más de 100.000 vehículos que salieron al mercado durante el ejercicio 2016/2017 –de abril a marzo— se pasaron a 89.000 en la temporada 2017/2018; Una caída superior al 10%.
Según los planes presentados por la dirección a los trabajadores, sólo 81.548 coches saldrán de la instalación a lo largo del año fiscal. La baja es debida a «problemas con las emisiones y la continua caída del mercado de Oriente Medio».
La nueva versión eléctrica de la NV200, que funciona mejor de lo esperado, y la producción de pick up para Mercedes y Renault no cubrirán las bajas a las que además se podría sumar la NV200 diésel, que los sindicatos ya dan por perdido a partir de la Semana Santa de 2019.