El fondo que se hace de oro en MásMóvil (y 560M lo explican)
Providence, el 'megafondo' que se frotó las manos tras la venta de Ono a Vodafone, se ha cobrado buena parte de su inversión en MásMóvil
La salida del megafondo americano Providence del capital de MásMóvil llegará, pero no será inmediata ni se ejecutara de manera descoordinada con la compañía. Es el mensaje del cuarto operador, que ha crecido gracias al capital riesgo de estos inversores americanos y que, pese a no haber dado ni un euro en dividendos, ha pagado solo en intereses de deuda un tercio de lo recibido. Pero no es solo eso: Providence terminará acumulando más de 560 millones sumando las ventas realizadas y las plusvalías latentes.
El fondo con sede en Nueva York ya ha recibido desde MásMóvil aproximadamente 60,8 millones de euros en intereses por un préstamo a través de bonos convertibles. Esta cantidad es la acumulada tras los pagos del pasado año (40,8 millones) y 2017 (22 millones), si bien en uno de los ejercicios también se incluye parte del bono convertible de ACS, ya cancelado.
Al acuerdo firmado en 2016 — el operador todavía cotizaba en el Mercado Alternativo Bursátil (MAB) y no había saltado al Mercado Continuo — le quedan cinco años de vida (finaliza en 2024). El valor nominal de estos bonos es de 178,5 millones de euros, convertibles en 8,11 millones de acciones a un precio de conversión de 22 euros por acción, y la deuda solo puede ejecutarse pasados tres años y medio desde su emisión, por lo que se espera que dentro de poco (2020) pueda hacerlo.
La otra parte del pastel para Providence, al igual que para otros de sus accionistas, está en las plusvalías latentes, que actualmente se sitúan en 88 millones de euros (77 descontando la inversión cuando entró en el capital) gracias a una participación directa del 3,9%, que ostenta a través de PEP VII-A International Limited, su sociedad radicada en las Islas Caimán. Tiene a dos hombres en el consejo de administración: John Han y Robert Sudo, ambos sin acciones de la compañía.
John Han y Robert Sudo, los dos consejeros de Providence dentro de MásMóvil.
La firma de capital riesgo ya vendió el pasado año un 14% del capital de MásMóvil, en lugar del 11% previsto, a un precio de 87,75 euros por acción. Esta venta redujo su participación directa desde el 18%, lo que permitió elevar el free float de la compañía, aumentar la base de accionistas y lo más importante: ingresar 234 millones de euros con la venta.
Fuentes cercanas a la operación consideraron que las motivaciones de Providence fueron evitar lanzar una opa. El fondo de capital riesgo tiene unos fines puramente financieros en la compañía y en su hoja de ruta no está ostentar una posición de control en la teleco amarilla.
De donde Providence todavía no ha rascado ni un euro ha sido a través de dividendo. En los tres primeros años en el capital de MásMóvil no ha podido y tampoco lo hará en este 2019, en el que la compañía tiene previsto un alto nivel de inversión, con un capex de 360 millones de euros (238 millones de euros se destinarán a crecimiento y los otros 122 millones de euros a mantenimiento).
Providence, fundamental en MásMóvil
El acuerdo entre el megafondo americano y el operador amarillo ha sido positivo para ambos. La compañía obtuvo gasolina necesaria para financiar parte de las adquisiciones de Pepephone (158 millones) y Yoigo (612 millones), dos de sus dos marcas fundamentales en la actualidad. Y es que, tras examinar los resultados de 2018 presentados el jueves, MásMóvil es una compañía mucho más fuerte que en 2016. Tiene aproximadamente 8 millones de clientes — captó 1,4 millones de líneas nuevas en 2018, entre fijo y móvil de contrato — y sus ingresos están por encima de los 1.400 millones de euros.
Providence está especializado en sectores como la tecnología, los medios y las telecomunicaciones. Ha participado en operaciones con la compañía danesa TDC, el operador báltico de móvil Bite, el cableoperador alemán Kabel Deutschland y Warner Music Group. Sigue presente en compañías como Univision, la cadena de televisión líder en el mercado hispano en Estados Unidos, y en España se le conoce por dar el pelotazo con Ono tras ser adquirida por Vodafone.
Providence es sin duda uno de los grandes fondos de inversión internacionales. Pero, con 40.000 millones de dólares bajo gestión y millones de inversiones diversificadas por todo el mundo —en sus 26 años de historia ha invertido en 180 compañías—, no todo han sido buenas noticias. Ha tenido apuestas desastrosas, tal y como contaba The New York Times hace cuatro años, y también ha sido señalado por beneficiarse del tax ruling de Luxemburgo, el acuerdo fiscal secreto entre multinacionales y el gobierno del país que fue destapado por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).