El ‘efecto Amazon’ se desvance: DIA cae otro 6%
La cadena de supermercados pierde en dos días la mitad de lo ganado en bolsa tras los rumores de negociaciones con Amazon
Fue un espejismo. Sirvió para frenar el descalabro bursátil por unos días, pero los rumores de una hipotética compra de DIA por parte de Amazon comienzan a desvanecerse. La adquisición disparó por encima del 16% la cadena de supermercados y la despertó de una caída en picado desde hace un año. Poco duró su efecto: este martes se dejó el 6,09% de su valor en el parqué. Y los bajistas acechan.
Tras alcanzar un máximo de 2,26 euros durante la sesión del pasado viernes, la compañía cerró la jornada en 2,04 euros por acción; un valor mucho más cercano a los 1,85 euros en los que se movía antes de que surgieran los rumores acerca de conversaciones con el gigante tecnológico para que este lanzase una OPA.
Tras otra jornada en números rojos y siendo el farolillo rojo del IBEX, la capitalización de la empresa volvió a caer hasta los 1.294 millones de euros, por lo que vuelve a estar en el radar de Mikhail Fridman, su primer accionista y principal interesado en hacerse con la totalidad de la cotizada española.
Con la caída, la sociedad dirigida por Ricardo Currás vuelve a acercarse a la barrera psicológica de los 2 euros, una resistencia que rompió el pasado 31 de julio tras un 2018 de abrupto descenso. Desde comienzos de año pierdo el 58,1% de su valor en bolsa.
DIA reduce el 88% sus beneficios
La desconfianza alrededor de DIA es evidente entre los inversores. El plan de negocio actual no convence, y una prueba es la volatilidad que rodea a los supermercados. De hecho, las expectativas son tan bajas que una caída del beneficio del 88% fue recibida con subidas del 10% en el parqué. Todo lo que no fueran pérdidas era una sorpresa.
Por ello, la compañía controlada por el millonario Fridman anunció que presentará un nuevo plan estratégico en octubre. Se desconocen las líneas de dicho plan, pero se da por supuesto que el primer accionista de la empresa tratará de modernizarla.
El último año estuvo plagado de decepciones para la cadena española. Cerró el negocio en China y rompió alianzas con Caixabank y Eroski. Según los analistas de Banco Sabadell, la ruptura con la compañía vasca, con la que negociaba conjuntamente de cara a los proveedores, tuvo mayor impacto del esperado en la primera mitad de 2018.