DIA refuerza su cúpula para hacer frente a los malos resultados

La compañía de distribución DIA ha nombrado a Matthias Raimund director de Operaciones de todo el Grupo. Raimund, directivo de Lidl hasta 2015, también formará parte del Comité de Dirección, una estrategia del Grupo como medida de reforzar la estructura «para seguir acometiendo profundos cambios». 

El consejero delegado de DIA, Karl-Heinz Holland, quien también formó parte de la cúpula de Lidl, ha subrayado que el director de operaciones «será un pilar clave para el futuro de esta compañía aportando sus conocimientos para llevar a cabo el necesario proceso de cambio ya en marcha».

Raimund, según ha explicado el grupo en un comunicado, tendrá que «alcanzar la excelencia operativa de la red de tiendas, que supera las 6.800 en los cuatro países en los que DIA está presente: España, Portugal, Argentina y Brasil».

Con 25 años de experiencia en la distribución, el directivo alemán ha asegurado que sus «primeros pasos» serán «dar apoyo a los países restableciendo los básicos de tiendas y almacenes, revisar todos los procesos operativos para hacerlos más sencillos, eficientes y productivos» y establecer «estándares de excelencia que serán iguales en todos los territorios», pero adaptados a su realidad.

DIA continúa así reforzando su cúpula de la cadena de supermercados que ahora es propiedad de Letterone, del magnate ruso Mikhail Fridman. Hace apenas unos días, el grupo de supermercados anunció el nombramiento de un nuevo consejero delegado, Paul Berg, para su filial de perfumerías y productos de cuidado del hogar Clarel.

Medidas de DIA contra los malos resultados

El pasado lunes, Grupo DIA dio a conocer sus resultados hasta junio, que reflejaron una pérdida de 418,6 millones de euros, lo que supone multiplicar por catorce los -29,4 millones de euros que obtuvo en el mismo periodo del año anterior, y que atribuyó a «factores negativos y extraordinarios».

Fueron los primeros resultados que la empresa da a conocer tras hacerse efectiva en mayo la opa de Fridman a través de LetterOne, y en ellos también se anunciaba que habían iniciado un proceso de despido colectivo para su filial Grupo El Árbol, que afecta al cierre de las tiendas Max Descuentos y podría incluir a un máximo de 210 empleados.