Cellnex pone el foco en Reino Unido para volver al mercado
El consejero delegado de Cellnex ve oportunidades de crecimiento en media Europa tras un 2018 en ‘stand by’
Cellnex es una empresa en crecimiento que no para de invertir para tener cada vez más activos, es decir, torres de telecomunicaciones que dan servicio de internet, incluido 5G, y televisión. Pero en 2018 estuvo bastante parada. No por voluntad propia sino por la situación del sector, la mayoría de lo que invirtió eran proyectos firmados en años anteriores. Este 2019, no obstante, será otra cosa.
La compañía controlada por Edizione, el holding de la familia italiana Benetton, terminó 2018 con 25.032 emplazamientos —es decir, torres y nodos— en seis países: España, Italia, Holanda, Francia, Reino Unido y Suiza. La previsión de Cellnex es seguir creciendo por los acuerdos cerrados en años anteriores —hasta los 29.000 emplazamientos en 2027— y por las nuevas oportunidades que se abrirán este año en todos los países en los que ya se encuentra.
“Vemos 2019 con optimismo, porque va a haber muchas oportunidades de crecimiento en todos los países en los que estamos”, aseguró Tobías Martínez, consejero delegado de Cellnex, en la presentación de los resultados de 2018 de la compañía. La cotizada perdió 15 millones de euros por los costes extraordinarios del ERE llevado a cabo en 2018, cuyo importe repercutió íntegramente en las cuentas de dicho ejercicio. Por ello, prevén volver a números negro en 2019.
Volviendo al crecimiento, Martínez fue más allá y dijo que hay muchas opciones en diversas fases: “Muchas oportunidades son conocidas y públicas, otras se están cociendo y van a aparecer”, como fruto de externalización de infraestructuras por parte de operadores de telecomunicaciones, como hizo en su día Telefónica con sus torres, que agrupó en Telxius. “¿Cuántos proyectos encajarán? ¿En cuántos podremos ganar? Veremos, pero los estudiaremos todos”, añadió.
Tobías Martínez (Cellnex): “Vemos 2019 con optimismo, va a haber muchas oportunidades de crecimiento»
El más próximo es en Reino Unido y tiene precisamente a Telefónica como uno de los protagonistas. CTIL, participada al 50% por O2, la filial británica del gigante español, y Vodafone, está en el mercado, con un valor estimado de más de 2.500 millones de euros. “Claro que estamos interesados en analizarlo, encaja perfectamente con nuestra razón de ser y nuestra estrategia”, dijo el consejero delegado de Cellnex.
Además de Reino Unido, espera oportunidades en el resto de los países en los que se encuentra, aunque no es tan optimista respecto al resto de Europa, especialmente Alemania, el único gran mercado del continente que le queda por explotar. Pese a todo, los analizarán.
“Si el proyecto encaja en nuestra estrategia, lo miraremos. Hasta ahora lo hemos mirado todo, y esperamos que siga siendo así, con el apoyo de nuestro accionista de referencia. Pero no se trata de estar en todos los países sino de tener capacidad de crecimiento en los países en los que estamos”, precisó Martínez.
Pese a tener una deuda de 4,9 veces el ebitda, Cellnex cuenta con una capacidad de inversión. Dispone de una liquidez disponible de 1.590 millones de euros, que podría utilizar rápidamente si hubiera una oportunidad. Pero puede invertir más si la situación lo requiere. Podría endeudarse más aunque todo tiene un límite: estirar demasiado el chicle del apalancamiento podría conllevar rebajas de rating, lo que no interesa porque encarecería los créditos. Por ello, no descarta una ampliación de capital si la situación lo requiere.
Cellnex prevé volver a beneficios
Cellnex perdió 15 millones en 2018 pese a crecer en facturación y ebitda, a causa de un cambio de normativa contable y de que destinó 46 millones al plan de prejubilaciones y bajas incentivadas. Si estos extraordinarios, habría ganado 31 millones, un 20% más que en 2018. Por lo que respecta a los ingresos, se incrementaron el 13,7%, hasta los 901 millones, y el ebitda creció un 18%, hasta los 591 millones.
La compañía que preside Marco Patuano decidió adaptarse a la norma contable IFRS 16 con un año de antelación. Esta normativa elevó en cerca de 1.000 millones su deuda pero también contribuyó a un mayor ebitda. Con todo, el ratio deuda/ebitda se elevó hasta 4,9 veces, una ratio considerada alta, aunque se trate de una empresa en crecimiento. Cellnex prevé reducirla en 0,6 puntos por año hasta 2022, así como volver a beneficios ya este año.