Así triunfan Mercadona y Lidl en China sin tener tiendas
Mercadona y Lidl llegan a China de manera oficiosa: los usuarios utilizan una famosa plataforma para revender sus productos
Los productos de Mercadona y Lidl se han popularizado tanto que ya no se venden solo en España, sino que terminan en países tan lejanos como China, donde las cadenas de supermercados no tienen ninguna tienda física. Pero quienes venden los productos no son ni las compañías ni sus proveedores, sino clientes que optan por revender los artículos para hacer negocio.
Así, productos famosos como la crema Cien de Lidl u otros más exóticos para los ciudadanos chinos, como la paella de Mercadona, viajan más de 8.700 kilómetros y entran a través de una puerta poco conocida: Taobao, la plataforma de Alibaba en la que los clientes venden sus productos entre ellos.
Desde hace unos años, esta plataforma perteneciente al gigante chino del comercio electrónico se ha llenado de productos españoles. Los usuarios los compran en los supermercados para luego revenderlos con un pequeño margen a clientes chinos.
Taobao es una mezcla entre Amazon y Ebay pero está única y exclusivamente dirigida al mercado chino. Su tamaño ya es tan grande que lo utiliza todo tipo de gente —ocupa la posición número 14 entre las páginas más visitadas del mundo— para hacer negocios y compras.
Por ejemplo, el sazonador de paella de Mercadona, uno de los productos que aparecen en la web de Taobao, se vende por 4,18 dólares (3,71 euros al cambio actual). Aunque el precio de la web está en yenes, los usuarios acostumbran a pagar a través de Paypal, donde las divisas se cambian automáticamente. El sazonador para paella con azafrán Hacendado cuesta 1,30 euros.
La paella es uno de los productos de Mercadona que se revenden en China.
Otro de los productos de la cadena de supermercados valencianos que se ha popularizado en este bazar online son los Bañados en chocolate blanco de su marca blanca Hacendado. Este producto, cuyo fabricante es la empresa española Grupo Siro, conocida por ser el fabricante de galletas de Mercadona, se vende por 7,18 dólares (6,35 euros). Este artículo, que se comercializa en una caja de cuatro paquetes, cuesta 3,80 euros en España.
Los ‘Bañados’ en chocolate blanco de Hacendado, otro de los productos que aparecen en Taobao. Fuente: Taobao
Los artículos de marca blanca de Mercadona no solo tienen éxito bajo la marca Hacendado; también triunfan en la sección de cosméticos, comercializados bajo la enseña Deliplus. Es el caso de las toallitas desmaquillantes, que en Taobao muchos de los comerciantes las venden por 3,74 dólares (3,28 euros al cambio actual). En Mercadona únicamente cuestan 95 céntimos.
Toallitas de maquillaje de Mercadona. Fuente: Taobao
La crema Cien de Lidl, un objeto codiciado
Los usuarios chinos también desean algunos productos de cosmética que se han popularizado en España. El mejor ejemplo es el de la crema Cien de Lidl. En la web podemos encontrar a diferentes usuarios que la venden aproximadamente por 7,48 dólares (6,62 euros). La crema Cien de Lidl cuesta 2,99 de euros en los supermercados alemanes.
La crema Cien de Lidl, uno de los productos más populares. Fuente: Taobao
Todos estos productos tienen cada vez más salida en China. Los motivos son principalmente que la clase media del país está en auge, que cada vez tiene más poder adquisitivo y que el comercio electrónico es un canal de compra y venta que tiene mucha fuerza (en el Día del Soltero, festividad equivalente al Black Friday en China, Alibaba registra volúmenes de venta cercanos a los 3.000 millones de dólares).
Daigou, los agentes chinos necesarios
Bajo esta aparente facilidad para comprar y vender productos, se esconde una larga lista de requisitos que bloquean la entrada de vendedores que no sean chinos en el engranaje de Taobao.
Para subsanar estas exigencias ha emergido la figura del Daigou, nombre con el que se denomina a la persona que ejerce como intermediario. Acostumbra a vivir en el extranjero o estar de viaje y comprar lo que tú no puedes.
Los vendedores de Taobao acostumbran a tener dos perfiles. El turista que aprovecha su viaje a Europa, Australia o Corea para adquirir los productos y luego revenderlos, o el emigrante chino que ya vive en otro país y por encargo vende productos que sus usuarios seleccionan.
¿Por qué? Porque para vender en Taobao, para empezar, se necesita un documento de identificación chino, un número de cuenta bancaria china y una licencia de Proveedores de Contenidos en Internet (ICP).
Estos agentes, que acostumbran a llevarse comisiones, se ponen a disposición del público en Europa a través de internet. Se comunican a través de correo electrónico y no utilizan Whatsapp —la app está vetada en el país— , sino Wechat, su app de mensajería instantánea.