El punto negro de Lidl: dos alertas sanitarias en la quesería en sólo dos meses
La cadena alemana tiene en su nueva sección de quesos uno de sus principales problemas
Los que tienen en Lidl una de sus cadenas de confianza saben muy bien que los alemanes están en constante evolución y cambio. Y un buen ejemplo de ello lo podemos encontrar en una sección inaugurada en sus tiendas el pasado 10 de septiembre: La Quesería de Lidl.
Una sección en la que podemos encontrar 20 quesos diferentes, 10 de ellos nacionales y 10 extranjeros a muy buen precio. Con cuñas de 100 gramos en cada caso, se pueden encontrar variedades de que oscilan entre los 0.99 euros y los 2.39 euros.
Una idea, en principio, más que acertada. Pero, por mala fortuna para la cadena germana, han sido dos los contratiempos que han provocado que La Quesería de Lidl no haya empezado precisamente con buen pie.
La Quesería de Lidl, su punto negro
Y es que en apenas dos meses han sido dos los productos que han tenido que retirar de todos sus supermercados por la presencia de bacterias dañinas. Por un lado, el rulo de queso de cabra, en el que en algunos lotes se encontró Listeria. Por otro, el lote de brie, en este caso por la presencia de Escherichia.
Cabe destacar que en los dos casos los quesos provienen de su proveedor Jermi y que, como es lógico, en Lidl ya han tomado medidas. Al margen de eliminar los lotes afectados en los dos casos de todas sus tiendas, la cadena germana ha anunciado que todos aquellos que hayan comprado uno de los lotes afectados pueden ir a la tienda más cercana para devolverlo, incluso sin la necesidad de presentar el ticket de compra.
Si bien es cierto que parece que La Quesería de Lidl se ha convertido en el punto negro de la compañía (al menos en los últimos tiempos), también evidencian estos dos problemas que en Lidl se toman muy en serio los controles de todos y cada uno de los productos que se venden en sus supermercados.