La subida de precio del aceite de oliva: la OCU propone otras alternativas para tu dieta
La Organización de Consumidores y Usuarios apuesta por otras alternativas para sustituir a un aceite cuyo precio sigue al alza
A lo largo de los últimos dos años, la subida generalizada de los precios ha impactado de lleno en muchas de las actividades más básicas de nuestro día a día. Bienes de primera necesidad, como la electricidad o la gasolina, han visto cómo sus precios se han disparado sin límite a lo largo del último año.
Sin embargo, otra subida de precios que nos ha golpeado a todos de lleno y que ha afectado de forma muy negativa a la bolsa de nuestra compra, ha sido la subida del aceite de oliva. Un bien imprescindible en una dieta como la mediterránea, que ha aumentado hasta un 227% su precio a lo largo de los últimos años. Algo que nos ha obligado a buscar alternativas a este producto.
La OCU propone una lista de soluciones para acabar con el problema de la subida de precio del aceite
Lo cierto es que, a simple vista, parece un producto muy difícil de sustituir. Sin embargo, desde la Organización de Consumidores y Usuarios, como es habitual, nos han brindado una lista de futuribles para no tener que depender del aceite de oliva. Y las soluciones son de lo más variadas en función de cada situación y cada plato.
Sin ir más lejos, la OCU distingue, en primer lugar, el uso del aceite de oliva para salsas o aliños. Para estos casos, la propia OCU recomienda apostar por otro tipo de aceites mucho más accesibles económicamente, como son el aceite de girasol o el de soja. Es cierto que el sabor del de oliva es más intenso, pero es una solución práctica a este problema.
Para todas aquellas preparaciones en crudo, una de las principales actividades que requiere la presencia del aceite de oliva, la OCU propone los aceites de semilla como la mejor opción. Una opción que destaca por la presencia de grasas poliinsaturadas, que tienen un efecto sumamente positivo sobre nuestra salud. Y el aceite de nuez es una de esas alternativas.
Otra de las actividades que requieren una mayor presencia del aceite de oliva en nuestra cocina es para freír cualquier alimento. Y en este caso, entre las alternativas que propone la OCU, destacan algunos como el aceite de girasol o el aceite de orujo de oliva. ¿Por qué? Sencillo, son aceites que pueden alcanzar temperaturas muy altas sin degradarse, algo que lo convierte en complementos ideales para sustituir al aceite de oliva a la hora de freír.
Una lista con la que desde la Organización de Consumidores y Usuarios nos brinda un amplio abanico de soluciones ante el problema generado por la gran subida de precio del aceite de oliva. Y si bien es cierto que ninguna de estas opciones suple al 100% las características de este aceite, son alternativas que, como mínimo, debemos tener en cuenta.