La malagueña Postscan trae a España el modelo alemán de digitalización de correo
La compañía pretende alcanzar los 300 o 400 clientes en un plazo de 90 días y ya trabaja con empresas como la estadounidense Dole

Emilio Bustamante y Kathrin Solbach, socios fundadores de Postscan. Imagen: Postscan
La empresa malagueña Postscan pretende importar un modelo de negocio alemán que digitaliza cartas a sus clientes si no pueden acceder a ellas. Emilio Bustamante, CEO de la reciente compañía, justifica su idea explicando que «en Alemania aún se envían muchas cartas», como cuando «tienes un seguro médico o una tarjeta de crédito».
En España, tras haber hecho un estudio de mercado, no ha encontrado ningún servicio similar al de Caya, la empresa germánica en la que se ha inspirado. «Empezamos con una versión beta y 8 clientes», ha narrado Bustamante, «y vimos el potencial, porque en Alemania la empresa tiene 30.000 clientes y facturan 2 millones de euros».
Así que en 2024 ha lanzado un servicio con el objetivo de recibir correspondencia física en una dirección postal, digitalizarla y que el cliente pueda acceder a su contenido desde cualquier lugar: «Y dijimos: ¿Por qué no en España?»
Bustamante cree ver una necesidad en un mercado donde ha «detectado que se envían más de 9 millones de cartas al año». Sus principales clientes objetivo son por lo tanto nómadas digitales y extranjeros con segundas residencias en España.
El servicio de Postscan consiste en ofrecer una dirección temporal en España a quien no cuenta con una fija. Por ejemplo, «si eres un nómada digital y te vas a Bali», ha explicado el CEO a este periódico, «puedes pagar 7 euros al mes y recibir tus cartas en una aplicación».
Sus tarifas oscilan entre los 9 y los 99 euros, según el tipo de servicio que busque el usuario. Dependiendo de la cantidad de misivas que necesite digitalizar, la startup fija un precio para particulares y para empresas.
Empresas, la clave para su desarrollo
Este es precisamente el foco para los próximos años, en operar con compañías que ofrezcan a Postscan un volumen suficiente como para que sea sostenible. Bustamante ha puesto como ejemplo un contrato que están muy cerca de cerrar con una cadena de gimnasios holandesa, aunque ya trabajan con la empresa estadounidense hortofrutícola Dole.
Las cifras a las que pretende llegar en un plazo de tres meses son entre 300 y 400 clientes, y cuenta con dos posibles «business angels», inversores, que propiciarían el arranque final de la compañía que ya opera desde Málaga pero que se dirige a un público nacional. Y ha añadido: «Si en 90 días conseguimos la base de clientes que buscamos, podremos demostrar que hay una demanda real en España».
Para financiar su expansión, Postscan ha recurrido a distintas vías. La empresa ya ha presentado su candidatura a fondos de apoyo al emprendimiento como Enisa y ProMálaga, además de haber sido seleccionada por la incubadora Impact Hub de Málaga. «Estamos en proceso de buscar inversión, pero sabemos que aún necesitamos más clientes para que sea atractivo», ha admitido Bustamante.
Comienzos en 2024
La empresa comenzó a operar hace apenas unos meses, en 2024, cuando Emilio Bustamante y su socia, Kathrin Solbach, vieron la demanda que podría existir en España mientras trabajaban por cuenta propia como consultores desde Málaga.
Sin realizar grandes inversiones en publicidad, han llegado a clientes a través del boca a boca y la participación en comunidades de expatriados en redes sociales. «Nos llega gente de todas partes, desde Islas Canarias hasta Lugo», ha aclarado el CEO.
«Nos buscan», ha explicado, «porque han tenido problemas con la correspondencia, ya sea porque viven en una zona remota o porque no quieren depender de familiares para recibir documentos importantes».
A medio plazo, la expansión de Postscan pasa por mejorar su presencia digital actualizando su software y por equipar una oficina. «Ahora mismo hemos traducido el sitio web al inglés y queremos hacerlo en más idiomas», ha señalado Bustamante.