Se giran las tornas: Lasarte acude a Valencia para abastecerse de naranjas tras una semana de lluvias
La empresa se ha desmarcado del mercado sevillano, que por lo general no se puede permitir asumir unos costes adicionales de transporte y que no está especialmente afectado
El clima ha jugado una mala pasada a la empresa sevillana Lasarte, dedicada a la producción y comercialización de naranjas. Tras varios días de lluvias continuas en Andalucía, su gerente, José María Juarranz, se ha desplazado a Valencia para garantizar el suministro a sus clientes.
«He tenido que salir de viaje a Valencia para cerrar compras de naranjas», ha explicado Juarranz en declaraciones a este periódico. Y ha añadido: «Está lloviendo intensamente en nuestra tierra y no podemos dejar sin suministro a nuestros clientes». La situación ha obligado así a la compañía a buscar alternativas fuera de Andalucía para asegurar la disponibilidad de fruta durante la próxima semana.
Este movimiento contrasta con la posición de Lasarte que, cuando la DANA afectó gravemente a las plantaciones valencianas hace unos meses, vaticinaba un aumento de la demanda hacia los productores andaluces.
En aquel momento, José María Juarranz aseguró que las condiciones climáticas adversas en Valencia podrían suponer una ventaja competitiva para los cítricos sevillanos, al cubrir la falta de producción en la Comunidad Valenciana.
Otras empresas del sector de los cítricos, como Grupo Naturesa, que también tiene plantaciones en la Comunidad Valenciana, y Frutales de Alcolea, secundaron dicho punto de vista.
Una gran parte de las naranjas que abastecen los supermercados europeos proceden de Valencia, por lo que situaciones como las lluvias extremas en esa zona potenciaron la presencia de los cítricos sevillanos en el mercado internacional.
Sin embargo, ahora son otras precipitaciones, aunque de manera moderada, las que han golpeado a los cultivos de Sevilla y Huelva, obligando a empresas como Lasarte a buscar alternativas.
Un caso puntual, según la UPA
Aunque Lasarte ha tenido que recurrir a Valencia, esta situación no parece ser la norma general en el sector. Miguel García, responsable del área agroalimentaria de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), ha aclarado que el impacto de las lluvias no ha sido homogéneo en toda Andalucía y que muchas fincas continúan con la recolección sin mayores contratiempos.
«La naranja se puede recolectar siempre que no esté demasiado húmeda o verde», ha explicado García, y ha continuado: «En general, no hay problemas graves de recolección salvo en fincas muy afectadas por la lluvia».
Y ha esclarecido que las lluvias han sido especialmente intensas en Huelva, pero en Sevilla han dejado algunos días con condiciones aceptables para trabajar, tras prácticamente una semana seguida con chubascos en ambas provincias.
Mayores costes
Otro factor que explica por qué no todas las empresas optan por comprar en Valencia es el gasto asociado. «Llevar naranjas de Valencia hasta Sevilla supone un coste de transporte adicional que, sumado al precio de la mano de obra, hace que estas operaciones no sean rentables para todas las empresas», ha asegurado García.
Este tipo de adquisiciones también dependen de la variedad de la naranja y su madurez. Por ejemplo, las variedades como la Lane Late, que empiezan a recolectarse en esta época del año, son más susceptibles a ser recogidas en condiciones óptimas incluso con cierta humedad.
García también ha subrayado que, aunque la recolección de naranjas con humedad puede dañar la calidad de la fruta si no se manipula adecuadamente, muchas empresas en Andalucía han encontrado formas de continuar trabajando sin interrumpir su suministro.
«No se está viendo un movimiento masivo hacia Valencia», sino que, por el contrario, «la mayor parte de las empresas siguen operando con su producción local, ajustándose a las condiciones climáticas», ha reafirmado el representante de la UPA.