Lantania aprovecha la incertidumbre sobre el trasvase Tajo-Segura: centra su foco nacional en las desaladoras
Este desvío estratégico coincide con un momento que la empresa considera «muy singular, por la terminación de dos proyectos grandes a finales de 2023»
La continua posibilidad del cierre del trasvase Tajo-Segura aviva la esperanza de las empresas desaladoras, que esperan ser sustitutivas de la obra hidráulica. Lantania no es la excepción y ha cambiado de rumbo a nivel nacional para poner el foco en la desalación.
Pedro Almagro, director general de la parte del grupo dedicada al agua y ubicado en Sevilla, se ha referido en estos términos en su conversación con Economía Digital: «Si hubiera una modificación en el plan de trasvases, a nosotros, como unidad de negocio, nos conviene más que la solución del problema de la escasez de recursos se haga a través de la desalación».
Y ha añadido: «Evidentemente, el plan de desalación español nos interesa muchísimo». Almagro marca así una nueva línea de actuación de Lantania Aguas, que antes estaba más centrada en el tratamiento de aguas industriales para clientes privados en España, pero que espera poder entrar en el nuevo mercado un plazo de tiempo breve.
«En nuestra actividad nacional, todavía no hemos contratado nada, a pesar de que tenemos el foco en que la desalación pueda desarrollarse en el país», ha desarrollado el directivo. Aunque, en ese sentido, la compañía «ha estado presente en los principales concursos que han ocurrido en los últimos meses».
Y ha concluido, dando continuidad en la misma dirección: «No hemos tenido todavía la fortuna de contratar ninguno, pero estamos ofertando y vamos a seguir ofertando».
Amenaza al trasvase y caída de Lantania Aguas
Estas declaraciones coinciden temporalmente con un momento en el que el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, logró que el Congreso Federal del PSOE, celebrado el pasado domingo en Sevilla, apoyara el cierre efectivo del trasvase Tajo-Segura para los regantes de Alicante, Murcia y Almería.
Si esta medida se implementa por el Gobierno de Pedro Sánchez, el trasvase solo suministraría agua de manera excepcional durante periodos de sequía y únicamente para el abastecimiento doméstico, excluyendo completamente su uso en el ámbito agrícola.
Se abre así una puerta a empresas desaladoras, como Lantania. España, en concreto, ocupa el 10% de la facturación y de la actividad total de la empresa, pero no deja de ser su mercado de origen y una forma de crecer también a nivel internacional.
Almagro ha explicado que Lantania Aguas desarrolla, sobre todo, proyectos con empresas concretas en cuanto a «tratamiento de agua, tanto de proceso como de residual». Pero los proyectos grandes son «una rara avis», y suelen girar en torno a las decenas de miles de euros.
También coincide esta situación con una caída de la empresa dedicada al agua. «2024 ha sido un año muy singular por la terminación de dos proyectos grandes a finales de 2023», ha asegurado el director general.
Y ha añadido: «Si me apuras, este año hemos hecho más nacional que internacional, porque esta última parte la hemos contratado ahora y se va a ejecutar en 2025, 2026 y 2027». Almagro ha hecho referencia así a dos nuevos proyectos en Oriente Medio por valor de 950 millones de euros, lo que generará «un crecimiento muy significativo».
Grandes proyectos
Hasta ahora, Lantania ha colaborado, en España, con algunas grandes empresas como Atlantic Copper o Cobre las Cruces. Con respecto a la onubense, el grupo de ingeniería e infraestructuras forma parte del objetivo ‘vertido cero’ junto con Veolia, transacción de la que ha obtenido unos 5 millones de euros.
El impacto económico ha sido similar al obtenido de la empresa minera, que encargó a Lantania a principios de 2023 la puesta en marcha de una planta de gestión de agua. «El más grande en el que estamos», ha nombrado Almagro, «es el de Palma de Mallorca, que es de 90 millones de euros».
En este caso, la compañía trabaja con otros dos socios, Tedagua y Copasa, en un proyecto de 90 años, del que cada uno obtiene un tercio de la cifra total. Específicamente, consiste en la ampliación y remodelación de la estación depuradora de aguas residuales Palma II, de cara a solucionar los problemas existentes en Mallorca.