Cepsa suministra biocombustibles a la naviera japonesa NYK Line en el Puerto de Algeciras
La empresa energética consolida su búsqueda de la descarbonización del transporte pesado mediante la producción de moléculas verdes
Cepsa, proveedor líder de energía para el transporte marítimo en España, ha suministrado biocombustibles de segunda generación a la naviera japonesa Nippon Yusen Kabushiki Kaisha (NYK Line) en la Bahía de Algeciras utilizando su gabarra híbrida, Bahía Levante, para minimizar el impacto de carbono de la operación.
Para el suministro de 1030 toneladas de biocombustible 2G producido a un buque portavehículos de 199 metros de eslora operado por NYK Line, la gabarra híbrida Bahía Levante ha utilizado diésel 100 % renovable durante su navegación en el mar y ha utilizado baterías eléctricas en sus operaciones en la bahía.
Samir Fernández, director de Marine Fuel Solutions de Cepsa, ha asegurado: «A medida que la industria del transporte marítimo intensifica su búsqueda de soluciones de descarbonización, estamos decididos a mantener nuestro liderazgo en el suministro de combustible marítimo, ofreciendo a nuestros clientes soluciones cada vez más sostenibles a través de buques que también cumplen con los requisitos reglamentarios».
Y ha añadido: «Estamos encantados de que nuestros biocombustibles de segunda generación continúen siendo utilizados por la industria marítima a medida que avanza en su camino hacia la descarbonización. El suministro a NYK subraya nuestro doble esfuerzo para apoyar a nuestros clientes en su viaje hacia la descarbonización y para nuestras propias operaciones».
El uso de esta forma de obtener energía permite a las navieras adelantarse a los objetivos de descarbonización de la Organización Marítima Internacional (OMI) y la Unión Europea. Recientemente, la OMI ha actualizado su estrategia para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en el transporte marítimo, estableciendo metas ambiciosas que aumentarán progresivamente desde el 20 % en 2030 hasta lograr cero emisiones netas en 2050, en comparación con los niveles de 2008.
Mientras tanto, el paquete ‘Fit for 55’ de la Comisión Europea incluye ‘FuelEU Maritime’, una iniciativa legislativa que pretende reducir la intensidad de las emisiones de gases de efecto invernadero del transporte marítimo en un 2 % en 2025, un 6 % en 2030 y un 80 % en 2050, en comparación con los niveles de 2020, lo que promueve el uso de combustibles sostenibles.
Reducción de las emisiones de CO₂
Los biocombustibles de segunda generación, como los producidos por Cepsa, pueden utilizarse sin modificar los buques y tienen potencial para reducir las emisiones de CO₂ hasta en un 90 % a lo largo de su ciclo de vida en comparación con los combustibles fósiles tradicionales. Esta energética puede suministrar estos productos a los clientes de forma regular y, al utilizar la gabarra propulsada por baterías y biocombustibles, puede reducir aún más el impacto de carbono de las operaciones.
La iniciativa de Cepsa subraya su compromiso con los biocombustibles de segunda generación como catalizador para avanzar en la descarbonización del transporte marítimo. A través de su estrategia 2030, Positive Motion, Cepsa pretende liderar la movilidad sostenible y promover la descarbonización del transporte pesado (aéreo, marítimo y terrestre) mediante la producción de moléculas verdes.
La compañía aspira además a ser el primer productor de biocombustibles de España y Portugal en 2030, con una capacidad de producción de 2,5 millones de toneladas anuales, y de hidrógeno verde, con una capacidad de producción equivalente a 2 GW anuales. También ha anunciado proyectos ambiciosos para la producción de amoníaco y metanol verdes.