Airbus mira al A400M y al SAF en su «aviación del futuro» con Moeve como proveedor clave
La empresa aeronáutica está además estudiando la posibilidad de fabricar productos que funcionen con hidrógeno, un proceso todavía en una fase muy prematura
![El presidente de Airbus España, Francisco Sánchez Segura, durante el desayuno coloquio organizado por la Cámara de Comercio en Sevilla.](https://www.economiadigital.es/andalucia/wp-content/uploads/sites/5/2025/02/Francisco-Javier-Sanchez-Airbus-1000x665.jpg)
El presidente de Airbus España, Francisco Sánchez Segura, durante el desayuno coloquio organizado por la Cámara de Comercio en Sevilla. María José López / Europa Press
Airbus tiene clara su estrategia para los próximos años, según se ha expresado su presidente en España, Francisco Javier Sánchez, en el coloquio celebrado este jueves en el Hotel Alfonso XII de Sevilla: desarrollar su avión de defensa A400M e implementar los combustibles sostenibles de aviación (SAF, por sus siglas en inglés), pretensión para la que contará con Moeve como proveedor.
El A400M es un avión de transporte militar europeo, diseñado por el área Airbus Defence and Space para cubrir las demandas aéreas de los países adheridos al programa, que son España, Francia, Alemania, Reino Unido, Bélgica, Luxemburgo y Turquía.
El objetivo ahora mismo es mejorar sus características y adaptarlo a las necesidades de otros clientes más allá de las fuerzas de seguridad estatales, un avión que además se ensambla en La Rinconada (Sevilla). Hace unos días, de hecho, la compañía aeronáutica anunció que entregará este año al Gobierno de Indonesia el primer ejemplar del modelo.
El presidente de Airbus se ha mostrado optimista con este reto y está seguro de que llegará a buen término: «No hay otro avión en Europa que tenga esas capacidades». Y, desde su punto de vista, no existe la posibilidad de paralizar la producción, porque el esfuerzo por ajustar la línea de montaje «es tan grande que lo lógico es seguir desarrollándolo», así que «pararlo sería un error».
Moeve como socio estratégico
Otra pata de su estrategia de aquí a los próximos años es comenzar a utilizar SAF, que ha denominado el presidente como «aviación del futuro», en sus aeronaves comerciales y de defensa. De hecho, ya en 2022 Airbus volaba el A400M con este combustible.
Moeve juega un papel clave en este plan: es uno de los proveedores a gran escala de la compañía y tiene una presencia muy significativa en Palos de la Frontera (Huelva), una zona que geográficamente se encuentra próxima a donde se fabrica el nuevo modelo de defensa en Sevilla.
También tiene plantas en la provincia de Cádiz, por lo que se facilitaría el suministro a los aviones comerciales producidos en las fábricas de Puerto Real y del Puerto de Santa María, que en breve se fusionarán para hacer el llamado ‘Airbus Cádiz’.
En este sentido, otra línea de investigación de la empresa es el hidrógeno renovable, pero actualmente está «desarrollando la tecnología», por lo que está lejos aún de implantarse.
La razón que ha dado Francisco Javier Sánchez en su conversación con Economía Digital es que «cuando metes hidrógeno en el avión, básicamente tienes que cambiar el propio sistema: células de combustible, baterías, distribución del hidrógeno en el avión, cableado… todo eso tiene que estar adaptado».
Para ello, hay empresas que las que están trabajando, «pero no son lo que llamamos un clásico proveedor porque la tecnología no existe», ha puntualizado. En el proceso de un sistema, existe una escala del 1 al 9 para mostrar en qué punto se encuentra, y en este caso todavía se sitúa «en el 1 o en el 2». Así que, mientras tanto, «la realidad es el SAF».
Drones y satélites
En su pata de defensa, además, Airbus está preparando un proyecto de drones, conocido como ‘Sirtap’. En este caso irá de la mano de la malagueña Aertec, según ha explicado a este periódico su CEO y también presidente de Andalucía Aeroespace, Antonio Gómez-Guillamón.
El presidente de Airbus ha aportado además el detalle de que se pondrán a prueba estos dispositivos en el Centro de Experimentación y Certificación de Aeronaves Tripuladas desde Tierra (CEUS) del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial de la provincia de Huelva.
Estas instalaciones se presentaron el pasado octubre, ocasión para la que acudió el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y en la que ya se perfilaban posibles inversiones millonarias.
Con respecto a la tercera línea de negocio de Airbus, la espacial, el foco está puesto en fabricar 4 o 5 satélites al año de origen europeo. El objetivo, según ha señalado su presidente, es hacer frente al casi monopolio de Elon Musk, que con su empresa SpaceX, abarca «dos tercios de todos los satélites que hay en órbita».
Y también un foco de relevancia es el de restablecer la actividad de la pata comercial, muy desgastado en los últimos años. «Todavía no nos hemos recuperado del Covid-19», ha explicado Sánchez, ya que en 2018 y 2019 se fabricaron 800 y 863 aviones, respectivamente. En 2024, sin embargo, la cifra está en los 766.