La patronal andaluza de pisos turísticos: «Limitarnos no va a frenar la masificación de los barrios»
El vicepresidente de la asociación, Juan Ignacio Chávez, asegura que la nueva ordenanza de Sevilla solo va a lograr la proliferación de hoteles y apartamentos turísticos
Sevilla estrena regulación de pisos turísticos, tras el acuerdo alcanzado en el pleno del Ayuntamiento este jueves. Pero Juan Ignacio Chaves, vicepresidente de la Asociación de profesionales de viviendas y apartamentos turísticos de Andalucía (AvvaPro) sostiene que esa limitación a su sector «no va a frenar la masificación».
Específicamente, la nueva normativa recoge que los barrios hispalenses no podrán acoger más de un 10% de viviendas de uso turístico (VUT), pero ese porcentaje podrá variar en los próximos meses según las zonas. En el acuerdo de los grupos locales del PP y Vox se recoge, además, la obligación de encargar un nuevo informe que analice los diferentes territorios de Sevilla.
Pero ese tope ya definido, según la opinión expresada por Chaves, da lugar a que sigan creciendo «otras modalidades de alojamiento en la ciudad». En respuesta a preguntas de Economía Digital, el vicepresidente de la patronal ha concretado que se refiere «a los hoteles y los apartamentos turísticos». Estos últimos se diferencian de las VUT en que su uso es exclusivamente comercial, mientras que los pisos turísticos tienen una prioridad residencial.
La Federación Andaluza de Hoteles, según ha manifestado su secretario general, Rafael Barba, considera la nueva norma «buena y razonable», en el sentido de que busca «una competencia honesta y equilibrada en términos de exigencias».
Pero, en respuesta a la afirmación de la AvvaPro sobre la posibilidad de una proliferación de hoteles, Barba asegura que su sector también tiene «límites». Es cierto que no tienen un porcentaje que cumplir por barrios, pero estos negocios tampoco «se plantan en cualquier sitio», sino que es el propio Ayuntamiento quien decide «los usos que tienen los suelos en un determinado territorio». Y ha aseverado: «No es tan fácil montar un hotel».
Limitar las plazas
Desde el punto de vista de la asociación de los pisos turísticos de Andalucía, lo que igualaría la situación es que no se limiten «las VUT, sino las plazas que se ofertan en cada barrio para así poder reducir la masificación y evitar que otros alojamientos que no sean viviendas sigan aumentando».
Rafael Barba, en sus declaraciones, ha apuntado además las ventajas económicas que aporta el sector hotelero a la sociedad, en cuanto a «puestos de trabajo y efectos tributarios», que otorga un «valor añadido» mayor que lo que ofrecen los pisos turísticos.
Paralelamente, la AvvaPro recoge algunos datos en la misma línea, en un comunicado: «En Sevilla el impacto económico de estas viviendas supera los 530 millones al año, de los cuales el 60% corresponde a gastos en restauración, comercio y transporte». Y añade la patronal que su sector tiene una «demanda creciente y que es la opción elegida, mayoritariamente, por familias», que representan el 75% de los usuarios.
Medidas en Cádiz, Granada y Málaga
Sevilla se posiciona así como la primera ciudad andaluza en conseguir aprobar una normativa que regule las VUT, tras el decreto de la Junta de Andalucía en enero, cuando otorgaba potestad de regulación a los ayuntamientos.
Aunque en Cádiz, Granada y Málaga ya se han ido explorando maneras de ordenar el impacto de los pisos turísticos. En los dos últimos casos, la normativa recoge que las VUT tengan que cumplir los mismos requisitos que los establecimientos hosteleros.
Según lo expresado por Antonio Jesús Castillo, presidente de la Asociación de apartamentos, viviendas turísticas y alojamientos rurales de Granada (Avitar Granada), este tipo de alojamientos tiene que contar con «entrada, ascensor y suministro independientes», lo que considera «imposible» de cumplir en su ciudad.
En Cádiz la norma aprobada en julio fue fulminante: no conceder más licencias de viviendas de uso turístico. Esta ciudad destaca en la región por tener más VUT por número de habitantes que otras provincias con mayor demanda, como Málaga o Sevilla.