Dcoop y ASAJA ven inútil la rebaja del IVA del aceite: «Ninguna medida va a resolver el precio»
Las productoras aceiteras reclaman mejoras en las políticas hídricas como solución a la subida de precios
A Dcoop le parece que la rebaja del IVA al 0% es «positiva para el consumidor, pero no está pensada para el agricultor», tal como ha aseverado Esteban Carneros, responsable de Relaciones Corporativas. La solución que ha planteado ante la subida de los precios es una mejora de las políticas hídricas.
Así lo han sugerido también fuentes de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA), afirmando que ese tipo de medidas «no resuelven el precio». Si se baja el IVA, aunque al consumidor le cueste el aceite unos céntimos menos, la producción sigue siendo escasa y los precios van a continuar siendo altos.
Dcoop es actualmente la primera empresa del sector de la fabricación de aceite de oliva, con una facturación de 1.236.973.106 € en 2022 y cuenta con unos 800 empleados. Lo que ha propuesto su representante es que «los productores tengan un mejor acceso al agua».
El objetivo de su demanda, ha asegurado, es «que en los momentos de sequía no haya esas caídas de producción». El olivar tiene un cultivo tradicionalmente de secano, pero «cuando le aportas agua lo agradece, crece y da una mayor producción», han aclarado desde ASAJA.
Por lo tanto, aunque ahora mismo la situación de sequía en Andalucía es una realidad, Carneros ha explicado que «tiene que haber una mejora en las políticas hídricas». Porque, ha continuado, no habría tenido lugar «a este descenso tan brusco en la producción durante dos años».
Los precios no se hubieran encarecido tampoco de esa manera. Actualmente, los precios en origen del aceite de oliva, según el Observatorio de Precios y Mercados de la Junta de Andalucía, se sitúan en 7,96€/kg en el virgen extra, 7,40€/kg en el virgen y 7,21€/kg para el lampante. Su precio se ha disparado un 68% interanual.
Devolución tardía
Lucía Serrano, presidenta de la Federación Española de Industriales Fabricantes de Aceite de Oliva (Infaoliva), ha proporcionado un nuevo enfoque a la situación. El problema, denuncia, «es el soporte del IVA» que tienen los intermediadores, las empresas.
«Nosotros vendemos al consumidor», ha continuado, «pero al agricultor se le sigue pagando su IVA correspondiente». Cuando el impuesto del aceite bajó a un 5%, las empresas productoras tenían que sostener el otro 5%.
Pero en la actualidad, tras la rebaja que seguramente apruebe el Consejo de Gobierno el próximo martes, Serrano ha asegurado que ellos tienen «que mantener ese 10% hasta que hacen la devolución».
El reembolso de esos importes, según ha señalado la presidenta de Infaoliva, ronda «los tres meses cuando se presenta el IVA de forma mensual». Y añade: «Quien todavía lo hace anualmente, imagínese cuándo lo pueden devolver». Lo que ella propone es que «el Gobierno apruebe un coste cero o una línea de financiación para poder mantener eso».
La Junta
El Gobierno dio a conocer este viernes que aprobará en el Consejo de Ministros una rebaja del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) del aceite de oliva. En concreto, lo recortará hasta el 0% a partir del 1 de julio.
La Junta de Andalucía, sin embargo, esperará a «ver publicada» la supresión del IVA del aceite de oliva, una medida que lleva años pidiendo, según ha señalado el consejero portavoz, Ramón Fernández-Pacheco. «Si ahora han tenido a bien hacerlo, nosotros agradecidos», ha señalado en declaraciones a los medios en Almería, el consejero de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural.
De esta manera, una botella de un litro de aceite de oliva que cueste 10 euros verá reducido su precio en unos 50 céntimos. Para una garrafa de cinco litros de unos 40 euros, esta medida supondrá un ahorro de dos euros.
Además, Hacienda ha decidido que, de manera permanente, el aceite de oliva pase a formar parte del grupo de productos de primera necesidad como el pan, los huevos, las verduras y las frutas. Así, formará parte de los bienes y servicios que aplican un IVA superreducido, del 4% en condiciones normales.