Los sindicatos, sobre la campaña de aceituna de mesa: «Si se cumplen los convenios, no faltan trabajadores»

Las patronales agrarias de Sevilla y Córdoba denuncian un déficit entre el 30 y el 40% de empleados para la campaña que arrancará a principios de septiembre

Un hombre coge una aceituna de una rama de un olivo.

Un hombre coge una aceituna de una rama de un olivo. Carlos Castro / Europa Press

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Las campañas de recogida de olivas están cada vez más cercanas, unas semanas. Ante la más inminente, la de las aceitunas de mesa, Mónica Vega, responsable del área de agricultura de CCOO, ha asegurado que «a las empresas que cumplen los convenios no les faltan los trabajadores». 

Este sindicato responde de esta manera a la problemática que denuncia la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Andalucía, que prevé que falte mano de obra, principalmente en las provincias de Sevilla y Córdoba. Así lo ha confirmado Ignacio Fernández de Mesa, presidente cordobés de la asociación. 

Felipe Gayoso, asesor jurídico de la patronal, calcula un déficit «entre el 30% y el 40%» de los trabajadores necesarios para sacar adelante la campaña. No es por falta de personas en búsqueda de empleo en sector agrícola: hay unos 12.400 parados de este tipo en Sevilla y Córdoba, según los datos de julio que ofrece el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). 

Como consecuencia de estos datos, surge el conflicto: la patronal asegura que debería ser el Servicio Andaluz de Empleo quien facilitase el acceso a esas personas que buscan empleo, y el sindicato cree que los desempleados del sector escogerían los puestos de trabajo ofertados si realmente se cumplieran las condiciones firmadas en el convenio colectivo. 

Problemas en la contratación 

«Tiene que ser la administración la que averigüe cómo solucionar esto», explica Gayoso a Economía Digital. «Pensamos que esta campaña va a ser un poco mejor que la del año pasado porque no ha habido tanta sequía», continúa, «y tememos que el ambiente de trabajo no coincida con lo que necesitan los agricultores». 

ASAJA ya inició hace un mes un «plan de acción» para solucionar la falta de personal, que se resumió en una primera toma de contacto con responsables del Área de Trabajo e Inmigración del Ministerio de Trabajo y del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) de la Junta de Andalucía. 

En concreto, plantearon facilidades para la contratación de inmigrantes y «se puso en marcha una herramienta de demanda de empleo», han explicado desde la patronal. 

La patronal tiene además un convenio colectivo, firmado juntamente con CCOO, en el que se detallan las condiciones que deben tener los trabajadores agrícolas, como el sueldo mínimo interprofesional o complementos de antigüedad y de asistencia. 

El sindicato ha asegurado que «no falta mano de obra en el campo andaluz y que nunca se ha quedado una aceituna sin recoger». El problema, según sostiene la responsable del área agrícola, es que las empresas pagan «a destajo», un sistema mediante el cual el trabajador cobra su salario cuando recoge un número mínimo de cajas de olivas, en vez de por horas trabajadas. 

«Eso está expresamente prohibido», ha recordado Vega. Y cree que esta es la causa de que las empresas contraten a trabajadores inmigrantes: «Prefieren a trabajadores vulnerables, que no conocen el idioma, que vienen a trabajar fuera de su entorno y que no conocen la normativa».

Pero desde ASAJA defienden que cumplen estrictamente la legalidad y que acuden a estos empleados una vez calculan una escasez de mano de obra para recoger las olivas. Además, Gayoso ha matizado que el destajo es «la forma de trabajo más elegida por los trabajadores».

Campaña previa a la del aceite

La campaña del verdeo se diferencia de la dirigida a la producción de aceite en que se tiene que recoger de manera manual, para no estropear el producto. Y, tradicionalmente, se empieza a cosechar «la semana después de la Natividad de la Virgen», explican fuentes de ASAJA-Sevilla, «que este año empieza el día 9 de septiembre». 

Es en ese momento cuando abren las cooperativas, las responsables de almacenar las aceitunas en tanques de salmuera, para que fermenten e inicien su proceso. Por esa razón, no se puede adelantar la cosecha de las aceitunas de mesa, ha asegurado la asociación, porque «no se pueden guardar en ningún sitio durante un tiempo prolongado, como pasa con los frutos secos».

La campaña de recogida de aceitunas de mesa termina a finales de octubre o principios de noviembre, época que coincide con el que momento en el que comienza la campaña para elaborar aceite de oliva, principal producto exportado en Andalucía. Este producto ha tenido un desempeño sobresaliente en los primeros seis meses del año, alcanzando su mejor cifra exportadora con 2.441 millones de euros y un aumento del 68,3%.

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