Cámara Sevilla aviva el debate del SMI: «Hay que aplicar el IRPF por rentas, no por salarios»
El Observatorio Económico de Andalucía, originario de la asociación empresarial hispalense, considera que «no tiene ningún sentido que las personas que perciben el salario mínimo estén exentas» de pagar el impuesto
![El presidente del OEA, Francisco Ferraro; el presidente de la Cámara de Comercio de Sevilla, Francisco Herrero; y el profesor de Economía Aplicada de la UPO, Manuel Alejandro Hidalgo.](https://www.economiadigital.es/andalucia/wp-content/uploads/sites/5/2025/02/OEA-y-Camara-Sevila-1000x665.jpg)
El presidente del OEA, Francisco Ferraro; el presidente de la Cámara de Comercio de Sevilla, Francisco Herrero; y el profesor de Economía Aplicada de la UPO, Manuel Alejandro Hidalgo. Imagen: ED
El presidente del Observatorio Económico de Andalucía (OEA), Francisco Ferrero, ha aportado un contrapunto nuevo al debate sobre la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y si debería o no estar exento de pagar el IRPF. Desde su perspectiva, este impuesto debe aplicarse «por rentas», en vez de por sueldos.
Se ha manifestado con esta opinión tras la presentación del informe ‘Economía Andaluza. 4º Trimestre de 2024’ en la Cámara de Comercio de Sevilla, donde ha estado también presente Francisco Herrero, el presidente de la agrupación empresarial.
Según Ferrero, «todos los debates en España son políticos, no tienen racionalidad económica», por lo que ha subrayado la etimología de las siglas IRPF: «Impuesto sobre la renta de las personas físicas, es la renta que recibimos las personas».
Y ha abundado en su explicación: «Nosotros recibimos rentas por nuestro salario, por una deuda pública que nos da una rentabilidad, somos dueños de una empresa, tenemos un piso alquilado…».
Por lo que ha concluido que, desde su punto de vista, «no tiene ningún sentido que las personas que perciben el salario mínimo estén exentas, porque un señor que recibe el salario mínimo puede ser el propietario de un grupo de acciones por el que está recibiendo millones al año».
Se ha mostrado así contrario a la decisión del Ministerio de Hacienda, presidido por la también próxima candidata al PSOE andaluz, María Jesús Montero. El Gobierno, al contrario de lo que exigía la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, no ha adaptado los tramos del IRPF para dejar exentas a las personas que perciben el SMI.
Eso sí, los trabajadores que cobren el salario mínimo tributarán distintas cantidades en función de su situación económica y familiar.
Rechazo a la reducción de la jornada laboral
Otro tema polémico sobre el que se ha posicionado el OEA, una asociación compuesta por economistas independientes pero originaria de la Cámara de Comercio de Sevilla, es la reducción de la jornada laboral.
«Puede ser muy deseable, hasta el punto de que sea cero», ha ironizado Ferrero con la aprobación por parte de Herrero. «Pero el cuánto”, ha puntualizado, «dependerá de la capacidad de cada país».
Se ha referido así que los tienen una mayor productividad del trabajo o mayor nivel de renta «se pueden permitir trabajar menos». Mas España tiene «una productividad relativamente reducida», por lo que le parece más «conveniente» que los acuerdos se alcance entre las representaciones de trabajadores y las empresas, en vez de aplicar una normativa que afecte a todas por igual.
Y ha ejemplificado: «Nosotros queremos acceder a unos niveles de bienestar como esos países del norte de Europa que son nuestros referentes, pero si seguimos disminuyendo las horas de trabajo nos va a resultar más difícil».
La CEA también se posiciona
La Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), por su parte, también se ha introducido este jueves en los debates abiertos por el ministerio de Yolanda Díaz. Manuel Carlos Alba, el director del área jurídica y de relaciones laborales, ha señalado que «no se han respetado los parámetros que según el Estatuto de los Trabajadores deben constituir el referente para subir anualmente el SMI: inflación, productividad y coyuntura económica».
Y tampoco se respetan, desde su óptica, «los acuerdos que en materia de negociación colectiva firman las organizaciones empresariales y sindicales y que fijan para 2025 una subida salarial en torno al 3%».
Siguiendo con el razonamiento de la Cámara de Comercio sobre el aumento del salario mínimo interprofesional, ha opinado que «difícilmente se podrá hacer competitiva nuestra economía y mejorar los índices de empleo, de temporalidad contratación y formación si se va incrementando el coste del factor trabajo».
Por lo que ha criticado que el Gobierno «presenta un efecto fiscal con una paradoja irónica: el gobierno sube el salario, las empresas lo pagan y Hacienda lo recauda».