Felipe González: “Habrá reformas, no rupturas, y la sociedad catalana sabe que ese es el camino”
El PSC reúne al ex presidente con el francés Manuel Valls, y el alemán Martin Schulz en un acto de catarsis colectiva
El domingo Europa se juega su futuro inmediato. Y el PSC ha querido revitalizarse con un encuentro muy poco frecuente: en el acto de las europeas, en el polideportivo del Vall d’Hebron, en Barcelona, ha reunido al ex presidente del Gobierno, Felipe González; al primer ministro francés, Manuel Valls, y al candidato a la Comisión Europea, el alemán Martin Schulz, además de la candidata del PSOE, Elena Valenciano, del también candidato Javi López, el propio Pere Navarro, y el alcaldable de Barcelona, Jaume Collboni,
Aunque algunos dirigentes del PSC aseguraban estos días que la figura de González podría ser ya contraproducente –aseguró hace una semana que se podría llegar a una coalición entre el PP y el PSOE si la situación en España lo reclamara– lo cierto es que su figura sigue provocando una catarsis colectiva para la familia socialista.
Distancias con el PP
González, en todo caso, ha querido reflejar las grandes diferencias entre el PP y el PSOE, asegurando que no recuerda “una sola medida de carácter progresista” que haya aprobado cuando ha gobernado, con Aznar o con Rajoy. Pero el ex presidente, en Barcelona, quería ofrecer un claro apoyo al PSC, y a Pere Navarro en concreto, respecto al proceso soberanista que se vive en Catalunya.
Y lo ha hecho para afirmar que la solución no pasará por rupturas, que la propia identidad catalana “implica diálogo y convivencia”, y que el precio que deberán pagar los socialistas catalanes es la paciencia, y el saber esperar. “La solución llegará con reformas, no con rupturas, y, aunque ahora no parezca que sea así, la sociedad catalana sabe que ese es el camino”, ha asegurado, dando a entender que el PSC acabará recogiendo los frutos de esa espera y de una situación que le mantiene ahora en una posición minoritaria.
Reformas de la izquierda
El socialista alemán ha logrado los aplausos de los asistentes, con su castellano con fuerte acento, tras reivindicar otra Europa que tenga en cuenta a la población con menos recursos, y a los jóvenes que ahora se ven sin trabajo.
Y el socialista Manuel Valls, nacido en Barcelona, ha reivindicado la potencia de Francia para integrar la inmigración, que le ha llevado a ser primer ministro de Francia. Valls ha querido presentar su plan de reformas económicas como una alternativa para la izquierda europea. “Yo represento una política de izquierdas que asume su reformismo”, ha asegurado.
El PSC espera recoger parte de esos frutos este mismo domingo, aunque la gran batalla electoral la protagonizan CiU y ERC.