Schulz: “Europa no necesita armonización fiscal, requiere un pacto de los 28”

El presidente del Parlamento Europeo, el alemán Martin Schulz, ha iniciado su particular road show para preparar la candidatura de los socialistas europeos en los comicios del próximo mayo. Y, de pasada, también da a conocer su nuevo libro Europa, la última oportunidad (RBA Libros). Para evitar el abismo al que se acerca, Schulz reclama desde Barcelona más trabajo para poder implementar políticas comunitarias que no dependan de uno u otro estado miembro. Una suerte de cambio de rumbo a raíz del malestar social que ha desatado en el sur del continente las políticas de austeridad.

Precisamente, el capítulo económico es uno de los que más preocupa al alemán.

Pago de impuestos

Schulz defiende la implementación de una tasa a las transacciones financieras. Pero sin la creación de un ministerio fiscal comunitario. “Europa no necesita una armonización fiscal, requiere un pacto de los 28”, ha señalado en una entrevista este domingo en la televisión pública catalana.

Un acuerdo entre los estados miembros que evitara que grandes multinacionales como Apple o Google, o empresas europeas menos poderosas que las dos tecnológicas eludan el pago de impuestos gracias a estructuras societarias al borde de la legalidad que terminan en paraísos fiscales. “No puede ser que los pequeños siempre paguen tasas y el sector financiero no contribuya a los países a salir de la crisis”, señala.

Más inversiones para el crecimiento

El presidente del Parlamento también da un espaldarazo a las críticas a las políticas de austeridad presupuestaria que han llevado a las fracturas sociales existentes en Grecia o Portugal, por ejemplo. Una crisis que Schulz no niega: “Somos el continente más rico del mundo pero con la riqueza peor repartida. La población griega hurga en la basura para vestirse mientras los superricos del país compran las viviendas más caras de Berlín o Londres”. Asegura que si no se da un golpe de timón a esta realidad, “Europa perderá”.

La propuesta del socialista alemán es más flexibilidad presupuestaria. Es decir, sanear las cuentas públicas pero sin cortar las inversiones destinadas al crecimiento económico de un país y a la creación de ocupación. Especialmente, al fomento del empleo entre los más jóvenes, la verdadera lacra de la UE. “No puede ser que la ciudadanía tenga la impresión de que los Estados puedan rescatar a los bancos pero no a las personas”, indica.

Varapalo a la banca

La banca europea ha recibido un varapalo del presidente del Parlamento. El socialista afirma que es inaceptable que las comisiones de los créditos ofrecidos lleguen al 6% cuando el dinero que han obtenido del Banco Central Europeo sólo tenía un peaje del 0,5%. Sobre todo en el caso de las entidades que han sido rescatadas con fondos públicos.

“Así, no tenemos ninguna opción. Debemos civilizar a los mercados del capitalismo salvaje actual”, ha sentenciado.

Inmigración legal

Donde sí apuesta por una política común es para solucionar el problema de la inmigración ilegal. “No puede venir todo el mundo a Europa, pero debemos ofrecer una oportunidad a la gente para que vengan al continente y se repartan por todos los países”.

Independencia catalana

Schulz ya dejó claro el pasado jueves que el movimiento independentista catalán no recibirá un espaldarazo del Parlamento Europeo. El socialista reitera que el debate nacionalista se debe mantener en las cortes españolas y catalanas, igual que ocurre con los movimientos secesionistas en Escocia o Bélgica, por ejemplo.

Lanza otro mensaje al envite nacionalista del Presidente Artur Mas (CiU): plantear las elecciones europeas de mayo de forma plebiscitaria es un error. “Esta es una cuestión que la UE no puede plantear, trabajamos por una mayor justicia social”, sentencia.