Salva la batería de tu móvil con estos trucos
Existen diversos problemas que puede sufrir la batería de nuestro dispositivo, así como diversas formas de ponerles solución
Dentro de la vida útil de nuestros teléfonos móviles, existen varios aspectos que conviene cuidar si queremos alargar lo máximo posible la duración de la misma. Como es evidente, son dispositivos en su mayoría muy delicados, y es conveniente contar con un extremo cuidado a la hora de realizar cualquier actividad con él, puesto que los smartphones más modernos, tienen, en su gran mayoría, un solo golpe.
No obstante, existen otros muchos factores que pueden conllevar un problema con nuestro teléfono móvil más allá de las posibles caídas. Y muchos de ellos tienen que ver con la batería de estos dispositivos, que suele ser uno de los aspectos de estos dispositivos que más problemas suele dar a medio y largo plazo.
Previamente os hemos hablado sobre algunos trucos para extender su vida útil durante un periodo de tiempo lo más largo posible, o también sobre algunas aplicaciones que aportan detalles técnicos muy concretos sobre el estado de la misma.
Como es lógico, como usuarios de un smartphone, debemos tener en cuenta que nos encontramos ante dispositivos que requieren de un cuidado muy especial para que podamos alargar su vida útil lo máximo posible y evitemos el hecho de tener que cambiar de dispositivo cada cierto tiempo. Sin embargo, existen algunos problemas que llegan de forma imprevista y son imposibles de evitar. Y a continuación, te hablaremos sobre algunos problemas que pueden hacer que tu teléfono no cargue correctamente.
La mayoría, derivados del hardware
La realidad es que la gran mayoría de problemas que pueden derivar en una carga incorrecta de nuestro teléfono suelen venir derivados de su hardware, o, lo que es lo mismo, el conjunto de elementos físicos que componen este dispositivo. Desde el cable, hasta la clavija, pasando por la propia batería.
Suele ser muy habitual que el problema de una carga no fructífera derive de un cable en mal estado. Y es que el primer punto a identificar, es precisamente el origen de este problema. Y en el caso de que sea cuestión del cable, es una gran noticia, ya que la solución es tan sencilla como adquirir un cable nuevo. Es conveniente, en la medida de lo posible, que este accesorio sea el original creado para tu dispositivo. Pero en caso de que no podamos adquirir el cable en cuestión, sí debemos asegurarnos que sea específico para nuestro modelo concreto.
Otra opción es que nuestro problema se encuentre en el puerto USB. Si tanto el cable como su adaptador están en buen estado, esta es otra de las opciones a tener en cuenta. Se trata de un problema más complicado, ya que por lo general suele venir dado por el hecho de que el puerto se haya desplazado por un movimiento erróneo, y no haga contacto con el cable de forma correcta.
Ante este problema, existe la posibilidad de intentar hacer un arreglo manual, intentando enderezar la posición del puerto con un alfiler. No obstante, se trata de una acción arriesgada que podría terminar por estropear nuestro teléfono, por lo que la opción más recomendable es acudir al servicio técnico.
La última opción, es que sea la propia batería la responsable de este problema. Ante esto sí que no se puede hacer nada más que acudir al propio servicio técnico de la compañía. Además, siempre que se encuentre en el periodo de los dos primeros años tras su compra, y no haya sido estropeada por un error humano, será un proceso que correrá a cargo de la garantía de nuestro dispositivo.
Problemas de software, menos frecuentes, pero posibles
Sin embargo, y aunque sea algo mucho menos habitual, también puede darse el caso de que nos encontremos ante un problema derivado del software, es decir, el conjunto de programas que conforman nuestro smartphone.
Por lo general, la mayoría de estos problemas derivados de este sistema, tienen su raíz en alguna de las diversas actualizaciones a las que se haya sometido de forma reciente el sistema operativo de nuestro teléfono. Ante esta situación, el usuario solo puede actuar haciendo un restablecimiento a los datos de fábrica, como es lógico con una copia de seguridad de por medio, o un retroceso a la versión anterior del sistema operativo en cuestión, si es que el problema viene dado por esta actualización.
También puede venir dado por la instalación de algunas aplicaciones que consuman en gran medida el uso de nuestra batería. Y, ante esta situación, la solución es tan sencilla como desinstalar la app en cuestión.