Ribó se olvida de los hosteleros
Solo el 5% de los establecimientos que han solicitado la ampliación de terrazas han recibido la autorización del Ayuntamiento
El pasado 22 de mayo la Concejalía del Espacio Público del Ayuntamiento de Valencia dio luz verde a un plan de ampliación de terrazas con el objetivo de repuntar el sector hostelero. Sin embargo, 13 días más tarde solo el 5% de los 1.300 establecimientos que solicitaron la ampliación de terrazas han recibido respuesta, según la Coordinadora de Hostelería de los Barrios de Valencia, que denuncia que la “ineficacia” del Ayuntamiento de Valencia está llevando al «colapso económico a las pymes de los barrios de la ciudad».
Y es que tras más de dos meses sin ingresos, los hosteleros no tienen que hacer frente únicamente a la limitación de aforo impuesta en cada una de las fases (50% del aforo de las terrazas en fase 1 y el 40% del aforo del interior en fase 2), sino también al «anquilosamiento burocrático» de la administración local: «El colapso administrativo no puede ser ahora el problema al que tengan que enfrentarse los hosteleros que han levantado las persianas, la mayoría a medio gas por las limitaciones de aforo y en muchos casos por falta de público».
El plan de ampliación de terrazas se aprobó el viernes 22 de mayo y no fue hasta el martes 26 cuando los locales pudieron tener acceso al portal digital del Ayuntamiento: «Resulta incomprensible que tardaran cinco días en habilitarlo». Las quejas de la Coordinadora son todavía mayores por las respuestas por parte del Ayuntamiento: «Nos han llegado a decir que la documentación adjuntada no es válida porque en el plano no se aprecia bien el espacio solicitado al no poder imprimirlo en color».
Mientras el Ayuntamiento tiene colapsado el sistema, el sector hostelero está facturando un 70% menos de media que en los meses previos al confinamiento. Desde la Coordinadora de Hostelería de los Barrios de Valencia reclaman ayuda urgente: «Necesitamos todos los recursos y facilidades posibles para mitigar las pérdidas económicas de un sector clave para el PIB de la ciudad, y que está viendo como sus ingresos son mínimos y apenas cubren gastos».
