¿Qué pasa con el retorno a las aulas universitarias?

“Hablar no es trabajar. Yo trabajo y lo que quiero es que se vean los resultados. Cuando haya resultados, compareceré ante los medios, pero no quiero salir por cualquier cosa. A partir de ahora, tendrán muchas conferencias de prensa mías”, expresó ayer el Ministro de Universidades, Manuel Castells, tras una reunión con el presidente de la Conferencia de Rectores (CRUE), José Carlos Gómez.

Bajo la excusa de no ser “un político profesional”, Castells compareció ayer por segunda vez desde que tomara posesión del cargo en enero. Otros Ministros hablan más “porque estaban más de actualidad”, llegó a afirmar.

Mientras, más de un millón y medio de universitarios españoles van a poner el primer pie en un curso, el 2020/21, que se inicia tras cuatro meses de una docencia online que en muchos casos resultó ser un fiasco y dos meses de vacaciones marcadas por la ‘nueva normalidad’. Una ‘nueva normalidad’ que, por ende, marcará también la formación de todos ellos.

Si bien en la ‘vuelta al cole’ se ha hecho un protocolo común consensuado con la comunidad educativa, la vuelta a la universidad trae más incertezas que verdades. Los universitarios apenas tienen información de cómo se ejecutará el curso que entra en 10 días y las universidades valencianas aún ultiman protocolos.

Por su parte, la consellera de Innovación, Universidades, Ciencia y Sociedad Digital, Carolina Pascual, se reunió el martes con los rectores de las universidades públicas valencianas. Les trasladó las nuevas directrices marcadas por el Ministerio de Universidades ante el nuevo escenario, entre las que destacan el uso obligatorio de mascarilla o la importancia de mantener la distancia de seguridad de 1,5 metros.

“ESTAMOS HACIENDO UN ESFUERZO INVERSOR IMPORTANTE”

“Las universidades necesitamos que nuestro trabajo se traduzca también en apoyo económico del fondo anunciado por el Gobierno para educación superior, porque estamos haciendo un esfuerzo inversor importante para adaptarnos a la pandemia que se debe compensar. Las universidades arrastramos muchos años de una falta de financiación adecuada y ajustada al servicio público que prestamos y no podemos seguir asumiendo estos esfuerzos adicionales”, denuncia la rectora de la Universitat Jaume I de Castellón (UJI), Eva Alcón.

Asimismo, elogia el “trabajo de coordinación entre las universidades, la Conselleria de Universidades, el Ministerio de Universidades y la CRUE” y alude a que “el pasado mes de junio las universidades públicas valencianas consensuamos la modalidad semipresencial para la vuelta a las clases en este curso 2020/21”.

En la UJI, esta variará en función de las diferentes singularidades de titulaciones y centros siguiendo la guía de adaptación a la docencia que aprobaron el pasado mes de julio. Para ello, Alcón explica que “se ha hecho un esfuerzo de mejora en infraestructura TIC, se ha equipado con cámaras web más de 100 aulas y se han hecho formaciones en recursos para docencia digital o de personal”, entre otros aspectos.

Aún así, confiesa, “somos conscientes de que la evolución de la pandemia en estos momentos dibuja un escenario difícil. Nuestra obligación como institución es adoptar todas aquellas medidas preventivas que, siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias, nos corresponde. Igualmente, hemos de ser conscientes de que el riesgo cero no existe”.

Para conseguir la máxima seguridad, se van a implementar medidas como el uso obligatorio de la mascarilla en todo el campus, la limitación de aforos en aulas, la distribución de gel hidroalcohólico, la señalización de itinerarios para desplazamientos dentro de edificios, el refuerzo de limpieza y desinfección y la adecuación del sistema de aire acondicionado para reforzar al máximo la renovación de aire en aulas y espacios de trabajo.

“NOS HUBIERA GUSTADO MÁS VISIBILIDAD”

El vicerrector de Ordenación Académica de la Universidad Católica de València (UCV), Luis Esteban, lamenta que “no hemos tenido la interlocución que hubiera sido deseable. De hecho, la secretaria autonómica se ha reunido con los rectores de las públicas y no lo ha hecho con los de las privadas. Hemos tenido que ir preguntando cómo hacer las cosas porque nuestro objetivo es cumplir el tema sanitario a rajatabla. Nos hubiera gustado más visibilidad. Yo no diría que se nos ha dejado de lado, pero han hecho un protocolo común para las públicas y nosotros nos hemos acoplado. Hubiera sido interesante hacer una reunión conjunta”.

Consciente de que “los rebrotes pueden surgir dentro o fuera de la Universidad, lo difícil es saber cómo surgen”, Esteban señala que su objetivo es tener «la mayor presencialidad posible respetando las distancias que Sanidad nos está indicando”.

Para que los alumnos puedan seguir todas las clases, la UCV ha instalado cámaras en todas las aulas: “Hemos hecho grupos más reducidos y los alumnos podrán ir a clase presencialmente y seguir las clases a través de Teams, que es el sistema que tenemos de Microsoft, desde casa o en otra aula de forma paralela. Hay titulaciones que caben todos, pero otras no. Cuando haya que hacer sistemas de rotación, todos recibirán las mismas clases”.

Por otra parte, asevera que, con los profesionales que tienen trabajando en la Facultad de Medicina, “hemos hecho un Comité Médico que asesorará al equipo rectoral para ver en qué puntos de la evolución de la pandemia sería aconsejable limitar un grupo o cerrar una sede”.

“HEMOS ESTADO COORDINADOS”

“Vamos a ver, las competencias que las universidades públicas tienen son con la propia Conselleria. Lo que corresponde a la Conselleria es coordinar a las universidades públicas, que son las que sustenta económicamente. En teoría, a las privadas no”, dilucida el rector de la Universitat d’Alacant (UA), Manuel Palomar, en alusión a las palabras de Esteban.

Sobre el curso, comenta que “vamos a llevar a cabo una docencia dual. Las asignaturas teóricas se van a impartir con un porcentaje de gente en las aulas y el resto de forma online. En cuanto a las prácticas, que son imprescindibles en muchos de los casos, se ha llegado a un acuerdo para adecuar la normativa entre universidades y Conselleria con el fin de que se puedan dar”.

De este modo, expresa que las personas “somos, en cada uno de nuestros ámbitos, conscientes de la situación”. En el ámbito universitario, argumenta, “hemos estado coordinados con el Ministerio de Universidades y con la Conselleria de Universidades. La conexión, el acuerdo y el diálogo han sido constantes. En ningún momento se nos ha dejado de lado. Todo lo contrario. Todas las decisiones que se han tomado han sido acordadas en función de las necesidades”.

Finalmente, muestra su preocupación por el hecho de que haya rebrotes y alude a que “hay que controlar la situación y la mejor manera es apelar a la responsabilidad individual. Nos compete a cada uno de nosotros con las medidas de seguridad e higiene. Por ahí pasa todo”.

MODELO DE DOBLE PRESENCIALIDAD

El vicerrector de Comunicación de la Universidad CEU Cardenal Herrera, José Manuel Amiguet, expone que “estamos trabajando en el modelo de la doble presencialidad desde hace meses. Hemos mantenido contactos con los estudiantes y profesores para la configuración de todas sus implicaciones, como por ejemplo el mecanismo adaptativo de prácticas que ajusta el calendario y sistema de prácticas en función de las circunstancias”.

Su modelo, a través del sistema Hyflex, permite que el estudiante pueda conectarse con el aula en que se está impartiendo la clase a través de tres cámaras y un sistema interactivo, de tal modo que el alumno puede ir cambiando el plano desde el que ve la clase e intervenir en directo para hablar con el profesor o sus compañeros.

Sobre él, comenta que “la sensación del estudiante que se conecta de forma digital es totalmente inmersiva” y, además, “garantiza la docencia de todos los estudiantes de las universidades CEU, que cuentan con un 25% de alumnos internacionales, en cualquiera de los escenarios que puedan plantearse”.

Por otra parte, asegura que “nos preocupa la salud de empleados y estudiantes, así que nos ocupa estar preparados para poder continuar con la actividad en cualquier supuesto. Por eso tenemos previsto incluso cómo puede continuar la docencia en un grupo que, por alguna razón, tuviera que estar confinado durante unas semanas”.

EL DECÁLOGO DE LA UV

La Universitat de València nos hace llegar el siguiente decálogo a partir del cual de articulará toda su actividad durante el curso 2020/21.

1. Distancia interpersonal de 1,5 metros.

2. Aforo limitado en aulas, de acuerdo con indicaciones Generalitat Valenciana.

3. Docencia híbrida: presencial, síncrona y asíncrona.

4. Uso de mascarilla obligatoria.

5. Gel desinfectante y jabón disponible para higiene de manos.

6. Refuerzo de limpieza.

7. Servicios de atención por cita previa y refuerzo de sistemas de atención telemática.

8. Prohibición de estar en zonas de paso.

9. Aforo limitado en WC y ascensores.

10. Accesos y circulación ordenada en las instalaciones universitarias.