Los falleros acusan a Sanidad de vetar la actividad en sus sedes
La Junta Central Fallera ha abandonado la Mesa de Seguimiento con la administración sanitaria al no haber avances en la nueva normativa para la desescalada
A menos de tres meses para la celebración de las Fallas, la Junta Central Fallera (JFC) ha denunciado este miércoles que la Conselleria de Sanidad no ha avanzado en la normativa para abrir los casales en el proceso de desescalada.
Por ello, el organismo rector de las Fallas ha decidido abandonar la Mesa de Seguimiento con la administración sanitaria mientras que el colectivo no descarta medidas de protesta porque, según afirma, «ha llegado el momento de decir basta».
La junta ha actuado en coordinación con el mundo fallero para expresar su «malestar» por los «incumplimientos» de los compromisos que se adquirieron por parte de Sanidad en las diversas reuniones mantenidas a lo largo de este tiempo con los colectivos falleros.
La JFC ha reclamado que continúan con una normativa que está «fuera de lugar» en comparación con otros colectivos culturales
Los casales «continúan con limitación horaria de apertura y con la prohibición de, incluso, beber agua en su interior», ha lamentado en un comunicado la JCF, en el que critica que los casales «continúan sometidos a unas medidas que están fuera de lugar si se comparan con otros colectivos».
En esta línea, ha lamentado que «no se les ha equiparado a entidades culturales ni se rigen por normativa hostelera ni están dentro de las reuniones familiares», sin que se haya dado «ninguna explicación razonable» por parte de Sanidad, a su juicio.
La JCF critica que, desde la Mesa de Seguimiento se trabajó en la importancia de las comisiones falleras de la Comunitat Valenciana «como eje vertebrador de la cultura en todos los ámbitos y aspectos, así como también de su papel económico y social».
«La propia Conselleria de Sanidad aseguró una desescalada progresiva en los casales que permitiría la actividad, dentro de unas normativas establecidas. Pero, a día de hoy, no se ha producido ningún avance», reprocha el organismo.
La JCF recuerda que la Conselleria de Sanidad se comprometió el lunes 14 de junio a levantar el veto a los casales el 1 de julio y se insistió en la reunión y en conversaciones posteriores «en la necesidad de no esperar tanto tiempo, máxime teniendo en cuenta que hay que preparar unas Fallas en septiembre», una petición que no se ha atendido.
«El colectivo fallero, formado por más de 250.000 personas, ha demostrado durante este año de pandemia su responsabilidad ante las circunstancias y también su colaboración con las autoridades sanitarias, así como disposición y empatía», expone el organismo, que pide «respeto y un trato igualitario con el resto de actividades económicas».