CCOO hace un ERE tras diez años de pérdidas
El sindicato reconoce que está perdiendo el respaldo de los trabajadores y despedirá a parte de su plantilla
CCOO en el País Valenciano (CCOO PV) aplicará un ERE, después de que sus órganos de dirección lo hayan decidido en una reunión que ha tenido lugar entre el 21 y el 22 de noviembre. Por ello, el sindicato ha acordado iniciar un proceso de negociación formal con el Comité de Empresa.
Asimismo, han apuntado como motivos de esta acción el «incremento inasumible de gastos», puesto que, según han indicado a través de un comunicado, «solo en masa salarial ha supuesto un aumento en los dos últimos años de más de un millón de euros».
Del conjunto de 15 millones de euros de presupuesto de qué dispone la sección sindical valenciana, la partida correspondiente al pago de salarios asciende hasta los 8 millones de euros. Además, tal y como han concretado, las deudas de la organización se sitúan en los 2,5 millones de euros.
En esta línea, han señalado la «reducción de los ingresos propios, especialmente las cuotas de afiliación», como otra de las razones que han provocado la decisión de acometer un ERE. «Las cuotas por afiliación descienden, a la vez que los gastos se disparan, fruto de la subida de precios», ha lamentado el sindicato para después destacar que las «pérdidas persistentes durante los últimos diez años han ascendido a más de 4 millones de euros».
A nivel nacional, CCOO ha descartado a este periódico que el ERE que hace el sindicato en comunidad valenciana se vaya a reproducir a nivel nacional.
Revertir la situación
«El sindicato ha resuelto no continuar con esa descapitalización y abordar medidas que reviertan la situación para obtener resultados positivos en los siguientes ejercicios, que le permitan regenerar el patrimonio y garantizar la viabilidad del sindicato», ha explicado.
En esta línea, ha aseverado que el objetivo con el que se encara la negociación es el de «llegar a un acuerdo con la representación legal, priorizando medidas de ajuste salarial, combinadas con otras fórmulas de flexibilidad, que minimicen todo lo posible el impacto en el empleo».
El sindicato lleva trabajando desde principios de año en un Plan Integral de Mejora. En este sentido, ha remarcado la «necesidad» de encarar la negociación junto con el despliegue de otras medidas recogidas en el plan, «que pasan por diversas vías de incremento de los ingresos, por un reajuste organizativo, por continuar con la reducción de gastos en servicios exteriores u otras partidas como de desplazamientos, dietas y de ahorro energético; así como la reestructuración de la deuda a largo plazo».
El pasado mes de enero, la dirección del sindicato acordó que el personal no cobrara los atrasos de 2021, producto de la desviación del IPC, y la congelación salarial en 2022, que se mantendrá en 2023. «Un esfuerzo asumido para no agravar más los problemas económicos de la organización y del que no se ha visto afectado el personal laboral, que ha cobrado los atrasos del año anterior y ha visto incrementado su salario conforme al IPC, tal y como tiene reconocido en el convenio colectivo», indica el sindicato.