Puig reprocha al Gobierno los retrasos en el Corredor Mediterráneo
El ministro de Transporte, José Luis Ábalos, señaló la semana pasada que las obras en el tramo Castellón-Valencia terminarían en 2024
El Corredor Mediterráneo es uno de los proyectos más ambiciosos que lleva más de 20 años sin desarrollarse plenamente. Este lunes, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha reprochado al Gobierno central los retrasos en el tramo entre Valencia y Castellón.
También se ha dirigido al Ejecutivo para «apretar el acelerador» de la inversión y a superar los «cuellos de botella burocráticos» en la adjudicación de las obras. «Vamos demasiado lentos», ha constatado. Así ha valorado los plazos que dio la semana pasada el ministro de Transportes, el valenciano José Luis Ábalos, en una interpelación de Junts per Catalunya en el Senado.
Según Ábalos, las obras entre las dos capitales provinciales acabarán en 2024
Según los cálculos del Ministerio, 2024 es el horizonte de finalización de las obras Valencia-Castellón porque están supeditadas a las conexiones adyacentes del Corredor en Cataluña.
Ábalos destacó que en este tramo se ha ejecutado más de un 26% de la inversión total prevista de 310 millones de euros, además de garantizar su compromiso de que el Corredor esté en funcionamiento «lo antes posible».
Puig, tras afirmar que «cualquier retraso es una mala noticia», ha remarcado que este no está relacionado con el presupuesto, sino con la logística y la ejecución. Ha destacado que la prioridad es la conexión interna del Corredor para el transporte de viajeros en la Comunitat, tras el «ahorro» de conexión a Barcelona que supuso la puesta en marcha de la variante de Vandellòs.
El presidente de la AVE critica la politización de Renfe y ADIF
En la misma línea, el presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Vicente Boluda, ha lamentado que si cualquier retraso es «doloroso» este lo es más todavía porque afecta especialmente a los valencianos, además de urgir a «ADIF, Renfe o el Gobierno» a que hagan un esfuerzo adicional porque ya no sabe si «son lo mismo».
«Alguien tendrá que resolverlo», ha recalcado, para recordar que llevan seis años reivindicando este proyecto desde La Encina (Alicante), el lugar simbólico que eligieron para el movimiento #QuieroCorredor.
Las infraestructuras ferroviarias que se planean instalar desde Algeciras (Andalucía) hasta la frontera francesa, uniendo ciudades tan importantes como Barcelona, Valencia, Alicante, Murcia y Málaga y conectándolas a su vez con el resto de Europa.