El PPCV exige a Puig un «muro de contención» contra la Ley Celaá
Los populares denuncian que esta norma supone la "muerte" de la educación pública y de calidad
El PPCV se ha apuntado a la lucha contra la LOMLOE –más conocida como Ley Celaá– por sus ataques a la concertada y a la libertad lingüística en los territorios donde el español convive con normalidad con el resto de lenguas cooficiales –valenciano, gallego y euskera– y exige un «muro de contención» para minimizar el impacto de la norma jurídica.
«La Comunitat ha sido la avanzadilla y el banco de experimentos de la ley Celaá. Vamos a continuar trabajando para hacer de muro de contención», ha prometido la presidenta del PP valenciano, Isabel Bonig, en rueda de prensa tras la aprobación de la LOMLOE este jueves en el Congreso.
La ‘popular’ ha denunciado que esta ley «atropella» la libertad y supone la «muerte» de la educación pública y de calidad. «Todo lo que lleva la ‘ley Celaá lo hemos vivido: Puig y Marzà ya han intentado eliminar la demanda social y llevar a cabo el adoctrinamiento y la imposición con la inmersión lingüística con una ley que era un chantaje», ha criticado sobre la política educativa del ‘president’, Ximo Puig (PSPV) y el conseller Vicent Marzà (Compromís).
Decreto de trilingüismo tumbado por el TSJCV
Pero ha vuelto a recordar que «fue el PP y diversas asociaciones quienes lo pararon en los tribunales y todo fue tumbado por el TSJCV y ratificado por el Supremo», con 42 sentencias ganadas. «Defendemos una escuela pública y de calidad, pero sobre todo libre, donde los padres sean libres para elegir el centro, el ideario y la lengua en la que quieren educar a sus hijos, tanto el castellano como el valenciano, lo que no respeta la ‘ley Celaá'», ha reivindicado.
Esto choca, a su juicio, con varios aspectos que recoge la LOMLOE, como «el nulo poder que se le da a la Inspección Educativa como contrapoder frente a la arbitrariedad de la administración y de los abusos». Es más, ha advertido que «iguala en la mediocridad a los alumnos».
Y ha enfatizado: «Mucha defensa de la escuela pública, pero luego vemos cómo la propia ministra, Isabel Celaá, ha llevado a sus hijas a un concertado, bilingüe y de los que diferencian por sexos, en un barrio rico. Igual que otros ilustres miembros del Partido Socialista».