Oltra anuncia «la mayor inversión social de la historia» en la CV
Promete ampliar la renta valenciana de inclusión "tanto como sea necesario" y estabilizar el envío de material anti-Covid
La consellera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, ha anunciado este viernes «la mayor inversión social de la historia» en la Comunitat en 2021, con un impulso a la atención domiciliaria y 41 millones para reforzar las residencias de mayores y salud mental entre nuevos centros públicos y reformas, junto a un aumento de plantillas.
Oltra ha presentado en Les Corts su proyecto para 2021 (1.921,4 millones, un 20% más) y ha garantizado el «compromiso explícito» de la Conselleria de Hacienda de ampliarlo en 21 millones en el primer trimestre, tras las discrepancias de los últimos días que obligaron a retrasar esta comparecencia y corregir las cuentas.
Tras recordar a los 640 mayores fallecidos en residencias valencianas, se ha comprometido a seguir apostando por centros basados en unidades de convivencia reducidas similares a un hogar, «un modelo muy efectivo en la lucha contra la Covid-19».
Para conseguirlo, la previsión es aumentar un 6% las plazas para mayores, un 5% las de diversidad funcional, un 1,4% en infancia y hasta un 28,4% en atención a mujeres, junto a alimentación de proximidad, instalación de placas fotovoltaicas y cambio de ventanas y calderas.
Las cuentas incluyen 41 millones para iniciar el plan de infraestructuras sociales con diputaciones y ayuntamientos, con nuevas residencias públicas de mayores en Castelló y València, la reforma integral de las de Aldaia, Elda o Borriana o una nueva de atención mental en Dénia.
Una de las principales apuestas es la equiparación salarial del personal sociosanitario de residencias y centros públicos al de la Conselleria de Sanidad. «Es poner prosa a la poesía: traducir los aplausos en los balcones», ha ilustrado Oltra.
También se prevé centralizar el mantenimiento con un servicio 24H para atender incidencias, así como mejorar las ratios con 109 técnicos en atención a dependientes y recuperar la gestión pública del sistema de farmacia. Para prevenir complicaciones se crearán direcciones de departamentos sociales con 21 trabajadores en las tres provincias.
Paralelamente hay una línea de 5 millones para «humanizar» y adaptar los servicios municipales a las necesidades Covid, junto a un acuerdo de suministro de material de protección para «estabilizar» y mejorar los envíos periódicos.
En atención domiciliaria hay 25,4 millones (+46%) para dar respuesta a las necesidades del coronavirus, sumados a los programas ‘Menjar a casa’ y ‘Major a casa’ y los 2 millones en ayudas para adaptar las casas de mayores o personas con diversidad funcional.
Pagar la dependencia
La dependencia es otro de los ejes, con un 6% más y el objetivo de aumentar los beneficiarios del sistema tras llegar a 100.716. Eso sí, la también portavoz del Consell ha vuelto a recordar al Gobierno que «continúa incumpliendo» su obligación de sufragar el 50%, a pesar del compromiso de llegar al 22% en 2021.
En centros de día hay 1.091 nuevas plazas para mayores (+48,4%), 751 de diversidad funcional y 72 de infancia, junto a los primeros centros pilotos nocturnos ‘AFTER’ de alojamiento familiar temporal de estancias reducidas para facilitar la conciliación.
Oltra ha prometido avanzar en la acreditación de cuidadores familiares con 1.800 euros al mes por niño o adolescente y contratar 183 agentes de igualdad y 303 de juventud en «la red más importante de España», la Xarxa Jove, con nueve coordinadores de salud emocional para paliar las consecuencias de la pandemia.
Otro de los objetivos es contratar a 3.800 personas gracias a que las diputaciones financiarán a partir de 2021 los servicios sociales de pueblos (hasta 15.000 habitantes la de Valencia y los de menos de 10.000 en Alicante y Castellón).
Los niños, los olvidados en la pandemia
En infancia, la consellera ha lamentado que sus derechos fueran «olvidados» en los momentos más duros de la pandemia: «Se han adoptado medidas más duras en parques que en espacios cerrados de adultos». Ha prometido tenerlos en cuenta con el refuerzo del Institut Valencià de la Joventut hasta 28,5 millones (+153%) y retomar la estrategia de envejecimiento activo, paralizada por la pandemia.
El presupuesto para inmigración sube un 66% con el programa piloto de hermanamiento de refugiados y la implantación del concierto en residencias, «uno de los compromisos más potentes del Consell» al llegar a todo el sistema.
Las políticas LGTBI son otra de las «señas de identidad ‘botánica’ frente a tentaciones involucionistas», con una nueva línea de medio millón para pueblos y 200.000 euros en campañas. Y las ayudas para población gitana suben un 28,5% como «uno de los colectivos con más impacto por la Covid».
Violencia de género y renta de inclusión
Para combatir la violencia machista hay 22,7 millones, casi el doble de lo que prevé gastar cada año el pacto valenciano que está al 83% de ejecución desde 2017. Hay nuevas ayudas de emergencia para sepelios o repatriación de víctimas e hijos, un compromiso tras el asesinato de Yésica Gularte este verano, así como deducciones fiscales y 300 euros al mes para mujeres prostituidas en la renta de inclusión.
En esta línea, ha advertido sobre lo duro que resulta el confinamiento tanto para las mujeres que viven con su agresor como para las personas con trastorno mental, que sufren «estigma, incomprensión y persecución en los balcones o paseando».
Por ello, y por la tasa de pobreza al alza, ha reafirmado su apuesta por la renta valenciana de inclusión hasta 255 millones, con 59.540 destinatarios actualmente y una ayuda media de 630 euros mensuales frente a los 486 del nuevo ingreso mínimo vital del Gobierno. Se ha comprometido a ampliarla «tanto como haga falta», al igual que en 2020 (de 156,8 a 276,2 millones),
También ha rebatido al PP que es «razonable» que esta prestación se actualice a la evolución de los precios a partir de 2021. «Mientras haya gente que no pueda llenar la nevera, seguiré defendiendo la renta, aunque tenga que ir a la luna o bajar al infierno», ha enfatizado.
Intenta cerrar la polémica con Soler
En el debate, la oposición ha cargado contra las discrepancias entre la vicepresidenta y Hacienda por el presupuesto de Igualdad –«las cuentas de la lechera (PP), numerito de mal gusto (Ciudadanos) o espectáculo lamentable (Vox)».
Oltra (Compromís) ha zanjado: «No me he peleado con el conseller Vicent Soler (PSPV) por ver quién tiene más dinero, me he peleado por cada céntimo que va para los más vulnerables de la Comunitat y seguiré haciéndolo».
«No hay un presupuesto A o B. Los de la caja B erais vosotros», ha replicado a la ‘popular’ Elena Bastidas, y ha invitado a Cs a «decirle a Toni Cantó que cuando vaya a hablar con Ximo Puig –‘president’ de la Generalitat y líder del PSPV– apoye la red pública de residencias en lugar de la colaboración público-privada».