Mónica Oltra, vicepresidenta de la Generalitat y portavoz del Consell, ha comunicado en rueda de prensa telemática tras la reunión semanal del Gobierno valenciano que la Generalitat garantizará que ningún inquilino de vivienda pública pierda su casa al perder su trabajo o ingresos por la crisis del coronavirus.
La Generalitat Valenciana realizará una bonificación a partir del próximo mes de abril con la suspensión de la obligación de pagar el alquiler durante tres meses, ya que regular el precio depende del Gobierno central. Este plazo se mantendrá a la espera de cómo evolucione la pandemia y el estado de alarma en España.
La medida beneficiará a unas 14.000 familias de la Comunitat, compuestas por alrededor de 50.000 personas. Los afectados verán bonificada la cuota mientras dure esta situación para que no tengan que decidir entre el alquiler o atender otros gastos de primera necesidad.
De esta manera, el vicepresidente segundo y conseller de Arquitectura Bioclimática, Rubén Martínez Dalmau, ha explicado que la bonificación no es una moratoria, sino que a los inquilinos se les exonerará del pago del alquiler «al cien por cien”.
Habrá dos tipos de bonificaciones. La primera, de carácter extraordinario, se basa en una bonificación durante tres meses del pago del alquiler de vivienda pública. Esta irá destinada a familias afectadas por pérdidas de empleo o ERTE.
La ordinaria es una prórroga de la bonificación del alquiler de vivienda pública a inquilinos que ya la tuvieran concedida hasta el 14 de marzo de 2020. El director general de la Entidad Valenciana de la Vivienda y Suelo (EVha), Alberto Aznar, explica que esta se justifica en que «las personas a las que se les aplica son las que se encuentran en situación de mayor vulnerabilidad de entre los inquilinos de vivienda pública”.
Así, EVha pondrá a disposición de inquilinos y servicios sociales municipales un formulario de solicitud que se acompañará de la documentación que acredite la pérdida de empleo y de ingresos. Se entrega de forma telemática, con atención presencial para personas que no dispongan de internet.