El Ayuntamiento de Valencia, investigado por posibles irregularidades en las bolsas de trabajo
La investigación pone en riesgo el trabajo de 300 empleados públicos, que accedieron a la plaza en 2018
El Ayuntamiento de Valencia acumula estos días varias polémicas por irregularidades en su actividad. Este viernes, el juzgado ha abierto una causa contra el consistorio tras recibir varias demandas de los empleados, al detectar algunas anomalías en las bolsas de trabajo.
Ahora, el gobierno local cuenta con un plazo de tres meses para aportar toda la documentación relativa al proceso que se llevó a cabo en 2018. En ella se dio empleo a 300 trabajadores públicos, que podrían verse afectados por la causa.
Entonces, la Concejalía que gestionaba el personal estaba liderada por Sergi Campillo de Compromís. El citado concejal aprobó que se creara una bolsa para contratar personal auxiliar administrativo y cuando terminó el proceso, las personas que no fueron seleccionadas pasaron a formar parte de una nueva bolsa.
Los denunciantes acusan que las personas contratadas no están capacitadas para desarrollar sus funciones
La decisión se adoptó tras un pacto con los sindicatos, en una mesa de negociación que los funcionarios indican que no tenía «potestad reglamentaria alguna» para modificar las normas que regulan las bases de las bolsas de trabajo.
«Son personas que no han aprobado el segundo ejercicio, es decir, que no están capacitados en la práctica para una mínima diligencia en la salida y correcta redacción de escritos y oficios», afirman. Esto también tiene efectos sobre los auxiliares que sí han pasado las fases del proceso.
«Que se agote la bolsa de trabajo no implica que se hayan de vulnerar las bases reguladoras de su formación por necesidades perentorias del servicio, o que no se convoquen nuevas pruebas para formar parte de la bolsa», explica la denuncia, que dice que los nombramientos son «son nulos de pleno derecho».
El gobierno municipal descartó cualquier tipo de prevaricación
El gobierno local ya hizo respondió a estas acusaciones señalando que los expedientes a los que se refiere la denuncia fueron legitimados por la jefatura del servicio, el secretario del área de Personal y la Intervención General del Ayuntamiento, con lo que subrayaron que es «simplemente imposible» cometer prevaricación con ese visto bueno.
En esta línea, se afirmó que tanto Campillo como la actual concejala, Luisa Notario, «están muy tranquilos» porque todo se realizó siguiendo la ley y con las aprobaciones necesarias.