Compromís advierte al PSOE: “Nos necesitará para los presupuestos”
Tanto el PP como Compromís reclaman un nuevo decreto para reactivar la economía municipal ane el fracaso del Gobierno
El rechazo del Congreso de los Diputados a la aprobación del Real Decreto que recogía el acuerdo alcanzado por el Gobierno con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) para la «cesión» al Estado de los 15.000 millones de remanentes de los ayuntamientos ha provocado una ruptura entre el PSPV y Compromís.
El cruce de tuits y declaraciones críticas entre Compromís y los socialistas valencianos ha sido constante desde que los diputados rechazaron el Real Decreto, lo que ha provocado que el propio alcalde de València, Joan Ribo, recuerde a su vicealcadesa socialista, Sandra Gómez, que el resultado de la votación en el Congreso “ha sido un fracaso del Gobierno” y ha pedido a sus socios de gobierno “mucha calma”, a la vez que el diputado Joan Baldoví les ha advertido que los votos de Compromís son necesarios para aprobar los Presupuestos Generales. Por el contrario, la vicealcaldesa ha continuado con sus críticas y ha señalado que “el minuto de gloria” del diputado de Compromis en el Congreso le ha costado 90 millones de euros a València.
Negociación indecente
En este sentido y ante las críticas que ha recibido por su votación en contra en el Congreso de los Diputados, Joan Baldoví ha insistido que «cuando alguien hace algunas acusaciones, hay que recordarle que, sin Compromís, Pedro Sánchez no sé a qué se dedicaría hoy. Pedro Sánchez accedió a la Presidencia del Gobierno gracias a los votos de Compromís”, entre otros, y ha señalado que siempre han sido leales en las votaciones que benefician a los ciudadanos a la vez que les ha advertido de que «nos van a necesitar para aprobar los Presupuestos«.
Durante la comparecencia de prensa, el dirigente de Compromís, ha señalado como su formación apoyó la moción de censura, la investidura de Pedro Sánchez y decretos como los del estado de alarma. Además, ha recordado que el actual gobierno lleva ya dos años y tiene que abordar cuestiones que fueron pactadas antes de la investidura como la regla de gasto, la reforma laboral o la ‘ley mordaza’. «¿Más que buscar culpables, por qué no buscamos soluciones?», ha señalado Baldoví.
Minutos de gloria
Por el contrario, la vicealcaldesa ha continuado con la posición crítica contra Compromís y ha definido como «una responsabilidad muy importante” con la ciudad su rechazo al decreto que les ha llevado a caer en un «error político importante» al «dejarse llevar por un movimiento que lo único que buscaba era el desgaste del Gobierno del PSOE». En opinión de la vicealcaldesa, que se ha sentido “bastante sorprendida y decepcionada” con sus socios de gobierno, «las batallas políticas de Madrid no deberían influir, sobre todo a los partidos de arraigo territorial, a la hora de tomar decisiones». En esta línea, ha resaltado que el «minuto de gloria nacional» del diputado de Compromís, Joan «Baldoví, “no le puede costar a València 90 millones de euros».
Desde el PP, la portavoz popular, Mª José Catalá, ha rechazado esta serie de enfrentamientos, sobre todo en la crisis sanitaria que vivimos y les ha pedido que «dejen ya de pelearse y mirarse el ombligo y comiencen a trabajar por los valencianos, especialmente, por aquellos que lo están pasando mal por la crisis de la Covid-19″.
Desde el Gobierno, el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, ha mostrado la extrañeza ante la respuesta de los partidos ya que la negociación se realizó a través de la Federación Española de Municipios y Provincias y ahora “pierden los ayuntamientos”. El ministro se ha planteado que si era insuficiente, al menos era una vía, “un margen para disponer de lo que tenían, y de esta forma, a falta de otra alternativa, se han quedado bastante descolocados». En opinión del ministro, en todo esta proceso, nadie ha sido capaz de ofrecer una alternativa al Decreto Ley presentado por el Gobierno.
Un nuevo consenso
Ante el rechazo del Congreso, tanto el PP como Compromís han solicitado al Gobierno que ponga sobre la mesa un nuevo decreto. Así, la portavoz del PP en el ayuntamiento de Valencia, Mª José Catalá, ha pedido «un marco de consenso para negociar un nuevo decreto» sobre remanentes de tesorería municipales que garantice que los ayuntamientos puedan destinar sus ahorros a reactivar la economía. Entre otros temas, la portavoz popular ha subrayado la necesidad de “poder disponer de los ahorros municipales para gastarlos en medidas prioritarias que palien la crisis de la Covid-19″.
«Ahora es el momento de negociar para que los ayuntamiento puedan disponer de sus ahorros», ha afirmado la dirigente popular, y «se tiene que hacer dentro de un marco de lealtad institucional y no mediante guerras y batallitas de egos en las redes sociales que abochornan a los valencianos».
Desde Compromís han reclamado al Gobierno, especialmente a la ministra de Hacienda, Mª Jesús Montero, que empiecen a negociar ya un nuevo decreto para liberar el superávit de los ayuntamientos y que puedan hacer frente a la crisis.
En esta línea, Baldoví ha recordado que han sido 15 los partidos que en el Congreso de los Diputados han votado “no” al Real Decreto. En este sentido ha afirmado que resulta «profundamente indecente» que se intente hacer creer que no se puede poner sobre la mesa un segundo decreto, ya que solo hace falta un cambio en la postura del gobierno y que sus propuestas se basen en el diálogo. La forma de actuar del gobierno, en opinión de Baldoví, «podría estar en el manual de las malas negociaciones».
Por último, Ribó ha insistido en que el decreto era «extraño», como lo demuestra el hecho de que consiguió poner de acuerdo en el ‘no’ a ayuntamientos de todos los colores políticos como los de València, Alicante y Castelló. «Las ciudades son Estado y merecen un trato digno», ha sentenciado el alcalde.
Para Ribó, el nuevo decreto tiene que tener como línea fundamental el criterio poblacional para el reparto del 100% de los fondos, lo que para València «supondrá unos 85 millones de euros», y desvincularlo de la mayor o menor cantidad de remanentes que tengan los ayuntamientos. Otra de sus peticiones es una aportación para las empresas municipales de transporte de todas las ciudades de España que, ante la caída de viajeros por el coronavirus, han visto reducidos sus ingresos notablemente.