Sudáfrica traslada sus exportaciones de Europa a Asia y allana el mercado para la naranja española

El principal competidor en el inicio de la campaña se retira de Europa tras exigirle el tratamiento en frío a sus exportaciones

Asociación de productores de cítricos de Sudáfrica

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Sudáfrica está desviando a Asia la naranja que enviaba a Europa, tal y como demuestra la estadística de exportaciones de la asociación de productores de cítricos de Sudáfrica. Este cambio se produce tras la exigencia de Europa a las importaciones sudafricanas de naranjas de aplicar el tratamiento en frío para evitar la transmisión de la plaga conocida como falsa polilla. La ausencia de cítricos tardíos del hemisferio sur sería un espaldarazo para la naranja española cuando se inicie en octubre la campaña citrícola del hemisferio norte.

Los datos referentes al 21 de agosto muestran que la exportación de naranjas sudafricanas “Valencia”, la variedad más tardía, está creciendo en los destinos asiáticos mientras se desploma más de un 60% sus ventas a Europa.
Tomando como referencia al principal puerto sudafricano, el recinto de Durban, el número de toneladas de naranja enviadas al sur y centro de Europa fue de 40.579 hasta la semana 33 del año 2020, cifra que bajó a 30.784 en idéntico periodo de 2021 mientras que en este ejercicio se ha quedado en sólo 11.826.

El otro mercado europeo para los sudafricanos, identificado como norte de Europa y Reino Unido, que comercialmente es determinante para la exportación española de naranja, alcanzó un nivel de 88.468 toneladas en 2020, 68.953 en 2021 y 45.308 este año. Aunque con mucho menor volumen, la evolución en Europa del Este y el mar Negro es similar (2.939-3-077-1.441).

Mientras tanto, el lejano Oriente y el sudeste asiático tuvo un volumen de 40.629 toneladas en 2020, bajó a 35.839 durante 2021 y ahora se ha disparado hasta las 59.316 toneladas. Caso similar ocurre en India y Asia, que tiene una evolución de 23.928 toneladas en 2020 frente a los 15.202 en 2021 y 21.390 este año.

Si medimos los datos acumulados, Sudáfrica ha reducido su volumen total en 17.315 toneladas de exportación en lo que lleva de año (al pasar de un volumen de 201.762 a 184.447) y lo ha hecho tras reducir sus ventas a Europa en 44.239 toneladas y aumentar la exportación a Asia en 29.655 toneladas.

Los productores de Sudáfrica llegarán al máximo de producción en una semana

Los pronósticos de la asociación de productores de cítricos de Sudáfrica advierten que alcanzarán su punto máximo de recolección el 11 de septiembre y que “los niveles de existencias en las cámaras frigoríficas de Durban siguen siendo altos”. Por ello, esperan que puedan seguir exportando hasta la semana 40, es decir, hasta el 9 de octubre.

Hasta el 2016, Sudáfrica podía introducir naranjas en Europa sin aranceles hasta el 15 de octubre pero la Unión Europea firmó un acuerdo comercial con el productor del hemisferio sur para ampliar el plazo hasta el 30 de noviembre. Esto implicó que las últimas naranjas sudafricanas, de la variedad “Valencia”, empezaron a competir con la primera gran variedad con volumen en España, que es la “Navelina”.

Tal y como explican los expertos del sector, el gran problema de esta pugna es que la presencia de naranja más barata procedente de Sudáfrica en octubre marca precios más bajos de arranque de la campaña española. Por ello, una menor presencia de competidores cuando se empiece la recolección de la navelina allanaría el mercado a los cítricos españoles, que fundamentalmente están distribuidos entre la Comunidad Valenciana y Andalucía.

Sudáfrica busca menos costes y menos seguridad vegetal

Tal y como aseguraron tanto la Asociación Valenciana de Agricultores como el Comité de Gestión Cítricos en la información publicada en Economía Digital el pasado 22 de agosto, el objetivo del tratamiento fitosanitario impuesto a Sudáfrica es evitar la plaga de la falsa polilla, que es un riesgo real en la naranja y por ello se obliga realizar el tratamiento en frío.

El movimiento de Sudáfrica de derivar la naranja a Asia en vez de Europa tiene un motivo económico y de falta de solidaridad en seguridad vegetal. La obligación de realizar un tratamiento en frío, proceso que se realiza en el contenedor del barco durante su traslado, supone un encarecimiento de los costes que ya está asumido por todos los productores, por ejemplo, para la exportación a Estados Unidos.

Trabajador sudafricano seleccionando limones

También es un riesgo la plaga de la falsa polilla en mandarinas y pomelos pero la Unión Europa todavía no lo ha reconocido. Sin embargo, la evidencia científica demuestra que no existe riesgo de transmisión de la plaga en los limones. Mientras Sudáfrica ha reducido drásticamente la exportación de naranjas a Europa, las ventas de limones al Viejo Continente se han disparado en el entorno del 50%.

Esto demuestra que Sudáfrica está intensificado su exportación con los productos y mercados donde tiene un menor coste y donde no tiene que aplicar lo que en el sector citrícola se llama “reciprocidad”, es decir, cumplir con los mismos requisitos fitosanitarios para que mi actividad comercial no te provoque a ti un problema adicional en forma de plaga.

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