Sas Automotive, Faurecia y Lear preparan despidos en sus plantas conectadas a Ford Almussafes   

La prolongación durante seis meses del ERTE en Ford Almussafes no va a poder ser replicado en el parque de proveedores, que sí que va a tener que acometer despidos a partir del mes de abril. Sas Automotive, Faurecia y Lear son los fabricantes de piezas que más van a estar afectados por el cese de la producción de S-Max y Galaxy a finales de marzo.

El pasado 26 de octubre, Ford anunció oficialmente que en abril dejaría de producir el S-Max y Galaxy en la factoría de Almussafes y ahora ha comunicado el plan de producción a los proveedores para el primer trimestre del año. «Se ve como desaparece la producción de S-Max y Galaxy de manera progresiva», explica un proveedor a Economía Digital, que matiza: «Hay piezas que vienen de Asia y que se tienen que conocer su producción con dos meses de antelación y a estos proveedores son a los que Ford les tiene que avisar que no va a continuar la producción de los modelos de la plataforma CD».

Según confirman a Economía Digital dos proveedores de Ford, las tres empresas que van a padecer más con el fin de la producción de S-Max y Galaxy son Sas Automotive, Faurecia y Lear. “Los centros de trabajo que tienen una dependencia más grande con Ford Almussafes son los que más sufren los cambios en la producción», apunta uno de los proveedores consultados.  

“Estas empresas pierden la plataforma CD (S-Max y Galaxy) por lo que dejarán a centenares de trabajadores sin carga de trabajo”, apunta un directivo del sector automovilístico valenciano consultado.  

Tras el anuncio de la prolongación del ERTE por parte de la factoría de Ford Almussafes, desde el cluster valenciano de la automoción (AVIA) se asegura: “Los proveedores directos han adaptado sus producciones y equipo a la situación actual de incertidumbre y ya tienen establecidos los mecanismos para hacer frente a todas las posibilidades que se abren con los OEM. Y el resto de proveedores han diversificados sectores y mercados y su afectación está amortiguada por esta estrategia”. 

La diferencia que establece AVIA divide a los proveedores en dos tipos. Por un lado, algunos fabricantes locales que han nacido y crecido a la sombra de la factoría de Ford Almussafes han buscado diversificación con otros centros de producción y otros clientes manteniendo la sede central en la Comunidad Valenciana. Lo mismo ha ocurrido con grandes multinacionales que, aunque llegaron al calor de Ford, ahora se han convertido en centro de soluciones para otras fábricas en España y Europa.

Por otra parte, hay grandes multinacionales y proveedores locales que su ubicación en el parque de proveedores Juan Carlos I de Almussafes sólo tiene razón de ser si obtienen un ahorro de costes eliminando el gasto logístico que supone fabricar las piezas junto a la cadena de montaje. La certificación del fin de S-Max y Galaxy vía el plan de producción del primer trimesre de 2023 supone apretar el botón rojo de los despidos. No tiene otra opción las empresas que fabrican las piezas más grandes, como son los asientos o los salpicaderos, o las empresas de logística para la factoría, cuyo trabajo no se puede diversificar ya que su razón de ser está ligada únicamente a la producción de Ford Almussafes.

Los despidos en este tipo de centros de trabajo se convierte en el primer trimestre del año en la única opción. Y más aún, sin la certificación por parte de Ford de la llegada de nuevos modelos a la factoría de Almussafes. «Es imposible ir a un banco a pedir financiación si no les puedes decir qué trabajo vas a tener«, explican desde una de las principales empresas de la automoción en Valencia.

La renuncia al Perte por parte de Ford ha quitado certidumbre a los proveedores al desconocer la fecha en la que se empezará a fabricar en Valencia la nueva versión del Mustang Mach-e. Por el contrario, la factoría de Volkswagen en Sagunto empezará las obras en enero de 2023, lo que le permitirá empezar a entregar baterías en 2026. Los nuevos proyectos de Volkswagen de gigafactorías al norte de Europa que todavía no están asignados ya tienen fecha prevista de inauguración en 2027.

Este decalaje es que preocupa a la automoción valenciana, cuyos principales deseos están relacionados con los planes de producción de Ford Almussafes. Los anhelos son conocer la fecha de inicio de producción de los nuevos modelos y que las previsiones de producción durante 2023 se cumplan en la cadena de montaje.