A pesar de que el Gobierno haya anunciado la reactivación del turismo, la patronal hotelera ha calculado en su escenario «más optimista» que la ocupación hostelera media este verano no superará el 70% en Benidorm y en la Costa Blanca. El presidente de Hosbec, Toni Mayor, ha asegurado que, aunque se trataba de un anuncio «muy esperado» por el sector, esta medida «hay que sustanciarla con hechos» y ha señalado que «nadie espere que lleguen los turistas y se remonte de forma brutal. No es posible».
Y es que, aunque el Gobierno adelantara una semana la reactivación de la movilidad entre provincias, lo cual estimularía el turismo en el mercado nacional, Hosbec tiene la vista puesta en el mercado británico por ser el principal emisor internacional: «El Reino Unido es nuestro principal cliente y ahí están más rezagados. Si a primeros de julio fuera normalizándose su situación eso nos vendría bien».
El presidente de los hoteleros ha agregado que para que los turistas viajen a la Costa Blanca a disfrutar de sus vacaciones influyen varios factores. No solo los extranjeros deben poder planificar sus vacaciones en España «en condiciones de seguridad en origen y en destino», sino que se debe tener en cuenta el factor psicológico: «Hay que pensar que el consumidor español y europeo está impactado por la pandemia en muchos sentidos, en el sanitario y el económico, pero también en el psicológico y de previsión de futuro».
Para la vuelta del Imserso, Hosbec calcula que habrá que esperar al menos hasta febrero del año que viene, con las campañas de San Valentín o Carnavales, para poder hacerlo con garantías y no verse afectado por la presión del virus.
Aun así, hoteleros y turoperadores afirman que tratarán de «salvar media temporada de verano, de julio a noviembre» y que esto supondrá sacrificar beneficios para estimular la demanda a base de ofertas y precios a la baja.