Ford exporta a Sudáfrica y Tailandia la innovación de una consultora valenciana con seis empleados
Paula Carsi, responsable de innovación de Ford Europa, asegura que mientras se elegía la continuidad de Almussafes o Saarlouis se fraguó el modelo diseñado por Agile Nomad en las plantas de Europa y ahora se amplia a nuevos mercados internacionales
Ford va a aplicar el modelo de innovación creado por una microconsultora valenciana a sus mercados de Sudáfrica, Tailandia y Vietnam después de chequear su éxito en la fábrica de Almussafes en primer lugar, en las fábricas de alemanas de Colonia y Saarlouis e inglesas de Halewood y Degaenham en una segunda fase y haber empezado ya a trasladar aplicaciones a Norteamérica.
Paula Carsí, responsable de innovación de Ford Europa, explicó en una jornada organizada por Redit en la escuela Luis Vives de la Cámara de Comercio de Valencia, que el proyecto de innovación que arrancó en Almussafes en 2021 tiene como origen la consultora valenciana Agile Nomad, una microempresa de seis trabajadores que formó al equipo directivo de innovación de Ford Almussafes y que ahora sigue acompañando a la multinacional en la expansión del modelo innovador con ADN valenciano.
«Nos costó meses que nos comprendiera (la dirección de Ford) y ahora esas mismas personas son las que no entienden como el resto de la compañía todavía no está aplicando el modelo», explico Carsí, que situó a la rapidez como uno de los principales factores de la innovación actualmente. Tras sólo dos años en el proyecto, el nuevo paso está dando el equipo de innovación nacido en Valencia y con la dirección de Paula Carsí consiste en incluir en la innovación lo que Ford llama «internacionational markets», es decir, Sudáfrica, Tailandia y Vietnam.
El handicap, según explicó la ingeniera valenciana, es que ahora no se puede esperar para aplicar una innovación a que existe la certeza de su ideoniedad. «Cuando una tecnología está en fase madurez ya hay otra tecnología que es mejor y esto supone que hay que asumir más riesgos y asegurar lo más rápido posible que una tecnología nueva va a funcionar», explicó Carsí.
El concepto general para llegar estos resultados es aumentar la agilidad en la toma de decisiones. Carlos Piqueras, de Agile Nomad, explica cómo funcionan esta microempresa de seis empleados: «Nuestra esencia es el alineamiento de la estrategia a la operativa mediante transformación organizativa de proceso y definición de producto o servicio que la compañía entrega al mercado».
Agile Nomad es una boutique de consultoría que ayuda a las compañías en el recorrido de crecimiento y todos los cambios que necesita para alinear la estrategia a su operativa a nivel de diseño organizativo, diseño operativo, relación con el mercado, es decir, agilizar la estrategia y la operativa. Entre sus clientes está, además de Ford, Power Electronics, Importaco, Baleària y Banak Importa, entre otros.
Choque cultural y pugna germano-española
El modelo de agilidad triunfó al empezar con un tamaño pequeño y absolutamente parametrizado, lo que permitió comprobar el resultado de cada una de las acciones. «Lo más importante es definir los objetivos y las capacidades y poder visulizar y medir los resultados», explicó Carsí.
«Si no hubiéramos tenido todos los medidores, no habríamos conseguido más recursos», asegura la responsable europea de innovación en Ford, que incidió en el gran problema que supone el choque cultural entre la mentalidad de los ingenieros, en la medida que quieren cononocer todas las reprecusionesantes de actuar, y la mentalidad agil, que delega en la que tiene la responsabilidad de cada apartado (con una estructura matricial en vez de piramidal) y adecúa los pasos que da a los resultados que va obteniendo de manera rápida, con la mínima pérdida económica y maximizando el beneficio.
Este choque cultural, («es clave que cada parte sepa qué gana haciendo el proyecto», confesaba Carsí) elevó la complejidad en la expansión del modelo valenciano a Alemania por el momento en el que se produjo. Mientras sindicatos y directivos se peleaban por saber si Almussafes o Saarlouis iba a ser la elegida para la nueva plataforma GE-2, Paula Carsí y su equipo buscaba la complicidad de los alemanes para la colaboración la innovación. Fue en esta adverso escenario, cuando las enseñanzas de Agile Nomad empezaron a circular por la organización europea de Ford y se consolidó una nueva forma de pensar, organizarse y hacer.
«No os podéis imaginar lo duro que fue decirles a los que estaban luchando por sobrevivir que nos teníamos que unir para innovar», resumió Carsí. De hecho, el liderzgo y trascendencia de las medidas que adopta el equipo de innovación surgido de Ford Almussafes es un factor que eleva la categoría de la factoría española en el ranking de Ford a nivel mundial y, con sólo dos años y su marcado ADN valenciano, el equipo de innovación se ha convertido en fortaleza y estandarte de Almussafes.
En la presentación del evento, el presidente de Redit, Fernando Saludes, aseguró que la evolución de la innovación en la Comunidad Valenciana se ha debido al “impulso de las empresas y de la administración autonómica, que nos han permitido avanzar”.
En este sentido, ha destacado especialmente el apoyo del Ivace. Saludes ha indicado que desde 2015 se ha incrementado un 150% más los fondos dedicados a la innovación con un total de 63 millones en 2023. “La madurez política de la Comisión de Industria (del gobierno valenciano) ha sabido ver las iniciativas que han ido sumando y fortaleciendo esta red”, apuntó.