La amenaza de VW de prescindir de la gigafactoría de Sagunto pone en riesgo el futuro de Martorell y Navarra
El fabricante alemán incide en que su proyecto global de 10.000 millones requiere de la aprobación del Perte ya que no se contempla una inversión aislada en una gigafactoría
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, y el antiguo CEO del Grupo Volkswagen, Herbert Diess. Imagen: Moncloa.
Volkswagen ha lanzado un pulso al gobierno que vas más allá de la gigafactoría de Sagunto. La apuesta por la electrificación tenía en tierras valencianas el elemento crítico de la gigafactoría. Sin la instalación para hacer baterías, la producción eléctrica de la fábrica de Seat en Martorell y de Volkswagen en Landaben (Navarra) está en entredicho.
La advertencia del fabricante de coches alemán es clara: «SEAT S.A., el Grupo Volkswagen y las 60 empresas que forman parte de Future: Fast Forward quieren movilizar 10.000 millones de euros para electrificar la industria del automóvil en España y convertir el país en un hub de la movilidad eléctrica en Europa». En mayo, Thomas Schmall dijo: “Construiremos la gigafactoría de baterías con una inversión de más de 3.000 millones de euros, pero los fondos del Perte son esenciales si queremos hacer realidad nuestra ambición de convertir a España en un centro europeo para vehículos eléctricos”.
No se habla ahora, por tanto, de que exista un riesgo sólo de la inversión de 3.000 millones de euros que está prevista para la gigafactoría de baterías de Sagunto sino de todo el proyecto de 10.000 millones. Anular una parte repercute directamente a la otra. Los 7.000 millones restantes son los que servirían para electrificar la fábrica catalana y la navarra y, para ello, hacen falta los 3.000, que son donde se esperan las ayudas públicas, tal y como advirtió Volkswagen desde el primer momento.
A nivel de producción, la conexión entre los tres puntos (Sagunto, Martorell y Landaben) también es irrompible. El proyecto original de PowerCo, mercantil creada para la construcción de la gigafactoría de Sagunto, tiene una potencia de 40 GWh. Dado que los modelos previstos para Seat Martorell y Volkswagen Landaben son pequeños, la capacidad de creación de baterías de 40 GWh está estimada en 800.000 coches. Dicha cifra coincide con los 500.000 previstos para la planta catalana junto con los 300.000 que se calculan para la cadena de montaje navarra.
La complejidad del Perte supone un freno
La resolución provisional del Perte del vehículo eléctrico otorgó a la propuesta de Volkswagen 167,3 millones de euros, que desde la multinacional alemana se espera aumentar hasta los 700. Actualmente están conseguidos algo más de 300 millones, aseguran las fuentes consultadas.
Según explican fuentes valencianas y catalanas próximas a los procesos financieros ligados al Perte, el problema que está teniendo la petición de ayudas de Volkswagen tiene que ver con la obligación de participación de pymes y los altos avales para altas inversiones que tienen que realizar estas empresas dentro del proyecto en comparación con su volumen. «La configuración del Perte es un problema porque si un socio del consorcio falla, todo el resto tienen que responder subsidiariamente«, apuntan desde las mesas de negociación del Perte con el Ministerio de Industria. Que una multinacional se haga cargo de una fallido de una pyme no es un problema, viceversa es dramático.
«El diseño del Perte ha sido un error. Hay cuestiones muy complejas que afectan a la baremación en la que el Ministerio se ha equivocado. La electrificación es una cuestión en la que si no vas hacia delante, vas hacia atrás«, apuntan fuentes valencianas implicadas en los Perte de la automoción. Con la respiración contenida, proveedores valencianos que esperan aumentar facturación con modelos eléctricos de Volkswagen aseguran que el pulso sólo busca una concesión mayor de fondos a Volkswagen por parte del gobierno.
El precedente de que Ford renunciara al Perte por no adecuarse la oferta de ayudas para fabricantes de coches que se quieren electrificar a los planes de los fabricantes de coches para electrificarse se prefiere obviar en el caso de Volkswagen.
La decisión definitiva del fabricante alemán tardará en concretarse. Primero tiene pasar el etéreo y reiterado plazo de los «próximos días» que con diversas variaciones semánticas ha ido conjugando el Ministerio de Industria. «Una vez se publique la resolución final del PERTE VEC, SEAT S.A., el Grupo Volkswagen y los 60 socios de Future: Fast Forward analizarán esta resolución y tomarán una decisión sobre los diferentes proyectos que forman Future: Fast Forward», avisan desde el gigante alemán que, como dice, decidirá sobre cada uno de los diferentes proyectos que forman parte de la estrategia de electrificación.
