La Comunitat Valenciana, la región con mayor déficit pese a las ayudas recibidas
La región cuenta con los peores datos en cuanto al saldo estructural y presupuestario de todas las CC.AA. de España
La paralización de la actividad para evitar la propagación del coronavirus ha tenido consecuencias económicas sobre todos los territorios. En el caso de las comunidades autónomas, han tenido que recibir múltiples ayudas del Estado para poder superar algunos estragos financieros durante 2020.
Los resultados del pasado ejercicio muestran que el saldo estructural de las CC.AA. fue del -1% del Producto Interior Bruto (PIB), cinco décimas menos que en 2019, según el informe El saldo estructural de las CCAA, 2018-2020, de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea).
Las transferencias que realizó el Gobierno en este periodo situó el saldo presupuestario en el -0,2% del PIB, lo que supone una mejora de cuatro décimas respecto a 2019 y el mejor dato de los últimos 15 años.
La Comunitat Valenciana, junto a Murcia, son las autonomías con mayor déficit estructural. En concreto la región valenciana tiene un -2%, mientras Murcia, un -1,8% del PIB. Si nos centramos en la CV, observamos que respecto a 2019 el saldo ha subido dos décimas, y cinco desde 2018.
El gasto de las regiones asociado a la lucha contra la pandemia ascendió a 13.149 millones, según Fedea estos se consolidarán en el tiempo porque el cálculo del saldo estructural tiene en cuenta todas estas distorsiones.
El saldo presupuestario
Respecto al saldo presupuestario en el conjunto de las administraciones públicas se deterioró el pasado ejercicio por la crisis de la Covid hasta el 10,97% del PIB debido a que el Estado central ha asumido parte del déficit de las comunidades.
La CV se encuentra entre las seis regiones que cerraron el ejercicio con un registro negativo. De hecho, también es la que peor índice cuenta. Le siguen Navarra (-1%), País Vasco y Murcia (1,1%), Cataluña (-0,4%), Extremadura (-0,2%), Galicia (-0,1%) y Madrid (-0,1%).
El informe concluye que el deterioro fiscal de las comunidades en 2020 todavía no se ha observado porque el Estado blindó a las regiones al no actualizar las entregas a cuenta del pasado 2020 a la caída del PIB y a través de fondos extraordinarios, como el Fondo Covid-19, para paliar los efectos de la pandemia.
También, advierte de que desde este ejercicio “se va a complicar notablemente la situación presupuestaria por el efecto de la liquidación del sistema de financiación autonómico de 2020”.